Consejos para quemaduras domésticas

Las cifras son preocupantes, el 60 por ciento de las quemaduras pasan en nuestro hogar, por eso debemos ser muy cuidadosos, sobre todo con nuestros hijos. Además debemos saber que dentro del hogar la cocina es la zona donde mayor veces ocurren estos accidentes.

En el caso de que sufras un accidente en el que se ocasione una quemadura térmica, eléctrica o química lo primero que se debe hacer es interrumpir el contacto con el agente causante y el cuerpo. Luego es aconsejable colocar la zona afectada bajo agua fría, según el jefe de servicio de Dermatología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, esto es importante: «ya que esto permite retirar los restos del agente causante, disminuye la inflamación y alivia el dolor«.

En el caso de que las lesiones sean leves se puede aplicar un antiséptico y un apósito para reducir el riesgo a infecciones. Esto se debe hacer unas horas después del accidente, cuando ya la inflamación y el dolor se hayan ido o disminuido.

En ocasiones será necesario acudir al médico: «Cuando hay más de un 10% de la superficie de la piel afectada de forma considerable es necesario acudir”. Es importante que se atiendan en un hospital las quemaduras extensas, además del tamaño es importante la profundidad de la misma, no tendrá la misma profundidad una quemadura ocasionada por el sol que una causada por el agua hirviendo.

Algunas zonas como la cara, genitales, manos o pies deben recibir atención inmediata porque la piel en estas zonas es muy delicada y fina.

En el caso de los niños menores de 10 años (y en los ancianos de más de 70). . «Los primeros tienen una curiosidad innata que puede llevarles a tocar cosas muy calientes, derramar líquidos que estaban en el fuego o jugar con cables. Los segundos pueden estar más despistados y no darse cuenta del riesgo«.

Vía | El Mundo
Foto | Flickr – Hdur

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