Verduras ricas en calcio

Uno de los nutrientes más necesitados, no solo durante el embarazo si no, también, para el posterior desarrollo del bebé, es el calcio. De él va a depender que disfrute de unos huesos fuertes y sanos, una sólida estructura ósea que va a mantener su anatomía a lo largo de la vida y unos dientes fuertes con los que, literalmente, comerse el mundo. Además se ha descubierto que una buena reserva de calcio en la infancia, evita muchas muertes en la edad adulta.

Al pensar en calcio, automáticamente, nuestra mente nos lleva a la leche y productos lácteos. Es cierto que las primeras necesidades de este mineral lo vamos a conseguir a través de la leche materna, pero no debemos olvidar que son otros muchos alimentos los que contienen calcio y que, ante una dieta con necesidades especiales: intolerancia a la lactosa, anemia… nos pueden ayudar a aumentar los niveles de este nutriente. Entre ellos están algunas verduras como las siguientes:

Espinacas. Son las reinas del calcio en el mundo vegetal. De hecho, 100 gramos de espinacas crudas cuentan con 210 miligramos de este mineral, por lo tanto se convierte en una de las verduras indispensables en las dietas infantiles y de embarazadas. Puede que a tu niño no terminen de gustarle, así que lo mejor es prepararle un rico menú en el que puedan comerlas sin notarlo: en ensalada, lasaña o un delicioso arroz al horno con espinacas.

Col o repollo. Por cada 100 gramos que consumas de este vegetal vas a conseguir 150 miligramos de calcio. Además este es uno de esos alimentos que ayudan la absorción de este mineral. Mucho mejor si la tomamos cruda ya que así mantiene todos sus nutrientes. Si te gusta la cocina oriental vas a poder disfrutar de muchos platos con esta verdura, uno de los más solicitados es el rollito de primavera.

Cebolla. También es de los que aportan una buena dosis de calcio. Aunque a niveles más bajos que los anteriores, la cebolla es necesaria para que nuestro cuerpo mantenga niveles óptimos de este nutriente. 100 gramos de cebollas nos aportan 20 miligramos de calcio. Además es una de las verduras que más juego nos da en la cocina, apareciendo en la mayoría de nuestras recetas ya sea cruda como cocinada.

Otras verduras: brócoli, berros, cardo o acelgas son otras verduras que contienen mucho calcio en su composición. A lo largo de este tiempo, y a fin de facilitar la asimilación de estos alimentos, tan rechazados por los niños, os hemos ofrecido divertidas y ricas recetas con las que triunfar en la mesa a la par que los alimentamos adecuadamente. Nuggets de brócoli, tarta de verdura y pollo y hamburguesas sanas son algunos ejemplos.

Vía | Innatia

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