Tomar el sol durante el embarazo
Si estás embarazada y tienes la posibilidad de disfrutar de la playa o la piscina, no tienes porque renunciar a los beneficios del sol y, además, lucir un bonito bronceado. Es más, los expertos nos hablan de las ventajas que ofrece el astro rey para nuestro bebé, ya que aporta vitamina D, nutriente fundamental para su óptimo desarrollo. No en vano está comprobado que aquellos niños que nacen al final de verano son mucho más grandes y altos, gracias a la exposición a los rayos solares.
Pero como todo en la vida, y mucha más con los problemas que puede acarrearnos una prolongada y desprotegida exposición solar, tenemos que llevar excesivo cuidado, por lo que es fundamental protegernos bien y seguir ciertas pautas. Aquí te dejamos algunos consejos para que disfrutes de un verano estupendo.
Lo primero que debemos hacer es evitar tomar el sol en las horas más fuertes, es decir, entre las 12 del mediodía y las 4 de la tarde. También es importante no tomarlo más de media hora seguida, mucho mejor si tras este periodo descansamos un buen rato a la sombra. Fundamental es, también, que estemos bien hidratadas, así que la botella de agua la tendremos siempre a mano.
El protector solar es fundamental, como mínimo tienes que aplicarte el de factor 15 y si tu piel es muy blanca, entonces ya hablaríamos de uno a partir de 30. Piensa que, por la acción hormonal durante el embarazo, tu piel se encuentra mucho más sensible a la hora de mancharse, además el sol aumenta la producción de melanina, con lo que debemos aumentar la protección en aquellos lugares, como la cara, más susceptibles a la pigmentación.
También el pelo debe estar protegido, para ello puedes recurrir a aquellos champús y cremas protectoras de cabello con acción beneficiosa para el sol.
Vía | Ser Padres
Foto | Artikini