La tele de nuestros peques: Phineas y Ferb

Seguramente ya todos la conocéis, ya que lleva bastante tiempo en la tele de nuestros hijos, desde 2008. Es una Serie Original de Disney Channel que nos cuenta las aventuras de dos hermanastros (Phineas y Ferb), un variopinto grupo de amigos y su hermana Candance que sólo tiene dos objetivos en la vida: casarse con su novio Jeremy, y pillar a sus dos hermanos en alguna trastada, cosa que nunca tiene éxito porque siempre, al final del capítulo, cualquier evidencia desapararece.

Phineas y Ferb (de February, febrero, mes en que se estrenó) es una gran serie que, bajo una apariencia blanca e infantil, oculta una gran cantidad de referencias a la cultura pop (cómics, clásicos de ciencia-ficción, cine, etc.), todo adornado con buenas canciones y humor absurdo.

Phineas y Ferb son dos hermanos increíblemente imaginativos y con enormes dotes para la ingeniería, que en cada capítulo construyen una máquina imposible (y que conlleva bastante riesgo), mientras que su hermana mayor, Candance, trata siempre de exponer esta «travesura» de los chicos a su madre, siempre sin conseguirlo. Pero, además, existe una segunda línea argumental en la que la mascota de la familia, Perry el ornitorrinco, es en realidad un agente secreto al más puro estilo James Bond(el agente P) que lucha contra el «malvado» profesor Doofenschmirtz.

Si no la conocéis podéis pensar que es una serie infantil como las demás. Grave error que se demuestra cuando en una competición de surf (en una playa que han construido en el jardín) las puntuaciones son «diez elevado a la quinta» y el juez se replantea la Teoría de la Relatividad. Es entonces cuando vemos que esta serie es mucho más.

Los personajes secundarios son, simplemente, geniales: la semi-nuerótica Candance, los padres (un flemático padre y una madre ajena a todo lo que hacen sus hijos), Isabella y sus girls-scouts, el matón (de buen corazón) Bufford o el empollón Baljit. También tenemos a Stacy, amiga de Candance y Jeremy, su novio, que han de tener una enorme paciencia con ella; y son muy destacables los abuelos americanos maternos y, sobre todo, los abuelos paternos, ingleses, totalmente surrealistas.

Pero uno de los más carismáticos, sin duda, es el profesor Doofenshmirtz, un genio malvado que siempre ve destruidas sus creaciones por el Agente P. Los inventos de este malvado profesor (todos con nombres acabados en -reitor, como «destructoreitor») merecerían un artículo aparte.

Como decimos, podremos encontrar muchas referencias a la cultura pop: James Bond, Star Wars, Star Trek, la máquina del tiempo de H.G. Wells (magnífico capítulo sobre las paradojas temporales), etc. Pero probablemente uno de los mayores éxitos de la serie sea debido a sus chistes recurrentes, a sus referencias internas, empezando por el esquema del capítulo que se repite en todos: Phineas comienza el día con un «¡Ferb, ya sé lo que vamos a hacer hoy!», al que le sigue un «¿Dónde está Perry?» y que termina con un «¡Oh, está ahí, Perry!» cuando llega de la misión secreta (y se ha quitado el difraz).

Estas bromas internas pueden consistir en que, por ejemplo, Candance usa la citada máquina del tiempo para volver al primer capítulo y cambiar todo el verano (y toda la historia futura también), pero llegan a su máxima plasmación en el primer largometraje en el que los protagonistas tendrán que utilizar todos los inventos que hemos visto durante la primera temporada.

Para terminar, sólo decir que la música es un elemento fundamental de la serie, ganando incluso premios Emmy. Desde madrigales medievales hasta musicales de Broadway, podremos encontrar cualquier género musical. Tal es el éxito de estas canciones que en la segunda temporada los espectadores votaron las 10 mejores canciones de la serie, dando lugar a un capítulo especial, el «El Cliptástico Top 10 Musical de Phineas y Ferb». Cabe destacar el magnífico (y difícil) doblaje al español realizado para esta serie, inventos y letras de canciones incluidas. Como ejemplo, una canción a más puro estilo de los años 50:

En resumen, una serie magnífica para niños de todas las edades (los creadores afirman que no es una serie infantil, si no que los niños no están excluidos como público), en la que encontraremos humor, aventuras, imaginación y valores como la creatividad, el tesón, el cariño fraternal o la competitivdad sana. Una serie que podrán ver sin que nosotros, los padres, debamos temer nada del guión y que, además, podremos disfrutar plenamente con ellos.

Página oficial | Disney Channel

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