Es a partir de los 6 meses cuando, por regla general, se producen los cambios más importantes dentro de la alimentación de nuestro bebé. Aunque dos meses antes ya hayamos introducido la papilla de cereales o de frutas para acompañar a sus ingestas de leche, es ahora cuando se puede afirmar que se inicia la verdadera tarea de aprender a comer. Encontrar sabores nuevos y experimentar con texturas diferentes es uno de los retos a los que los niños deben enfrentarse.
Y seguimos con nuestro especial recetario de bocadillos para los niños y, también, para el resto de la familia. Debéis tener en cuenta que estas son algunas recetas clásicas que hemos ido encontrando en la web pero que, dependiendo de vuestras preferencias, podéis variar a vuestro antojo, ya sabéis que con la imaginación, como con los colores, el paladar atiende sólo a sus gustos personales.
Hace unos días hablábamos de la importancia que tienen los bocadillos en la dieta de nuestros niños, sobre todo cuando están elaborados de forma equilibrada y con ingredientes sanos, naturales y que les van aportar buenas dosis de vitaminas y nutrientes esenciales. Lo malo es que, a menudo, no disponemos de imaginación suficiente para variar en nuestras recetas y nos limitamos a abrir el pan y dejar caer sobre él el primer alimento que nos viene a la mano.