En el mismo momento que el óvulo es fecundado por el espermatozoide, incluso aunque no lo sepamos todavía, ya se sabe si nuestro bebé será una niña o un niño. El sexo del ser humano se determina en el mismo momento de la concepción ya que es el espermatozoide el que pone la diferencia entre ambos sexos.
Para que un bebé nazca con órganos femeninos o masculinos sólo depende del cromosoma que aporte el espermatozoide que fecunda el óvulo. Si este cromosoma es X, será una niña; sin embargo si lleva el cromosoma Y, será un niño. Además de lo que la propia biología nos dice, también existen cantidad de supersticiones y leyendas que hablan sobre la elección del sexo del bebé, aunque no son del todo fiables.
A partir del próximo mes de noviembre se pondrá en vigor una ley en Alemania que permite no asignar el sexo al bebé cuando se le registra en el juzgado tras su nacimiento. De este modo, en su documentación, podrá aparecer como hasta ahora el género femenino o masculino o intersexual, lo que supondría que el bebé podrá elegir, en el caso que le apetezca, el sexo que quiera que le aparezca en su documentación o, por el contrario, dejarlo así para siempre.
Como comentamos en un artículo anteriormente, las "Gender Reveal Party" se están convirtiendo en las fiestas más de moda entre los padres que siempre están a la última. Aunque todavía no han llegado con fuerza a España, estoy convencida de que muy pronto comenzarán a implantarse entre nuestras familias.
Si todavía no conoces las "Baby Shower", fiestas donde se reune a familiares y amigos para dar una especie de bienvenida al futuro bebé, tengo que decirte que lamentablemente no estás a la moda. Y digo que no estás a la moda porque las baby shower ya forman parte del pasado, ahora lo más "trendy" es hacer una fiesta para dar a conocer el sexo del bebé, son las llamadas "Gender Reveal Party".
Normalmente lo primero que importa a la mujer embarazada es que el bebé se desarrolle con normalidad y que esté sano. Pero, una vez sabemos que todo está bien, es inevitable empezar a pensar en si nuestro bebé será niño o niña. También puede darse el caso de que por motivos de salud o por alguna enfermedad que se pueda heredar, conocer el sexo sea algo de vital importancia.
Ya os hemos explicado en otras ocasiones los diversos métodos que podemos utilizar para elegir, predecir o planear el sexo de nuestro bebé. Así contamos que existe un método milenario que es la tabla china y que, además, según los días de la fecundación con respecto a la ovulación, nuestra criatura puede ser niño o niña. Pero ahora, además, contamos con una novedosa investigación que nos habla de la influencia del sol en el sexo de nuestro futuro bebé.
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