En la actualidad se está dando una nueva tendencia entre los padres, llamados “helicópteros” por su conducta. En esta tendencia los padres se convierten en vigías permanentes que controlan cada paso y resguardan a sus hijos entre algodones. Con esto, en cierta forma, no permiten que los niños vivían una infancia relajada.
Un estudio sugiere que las vacaciones en la playa durante la infancia, pueden incrementar el riesgo de cáncer de piel, melanoma, en la vida adulta. En la investigación publicada por Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention, se observó a 681 niños y se preguntó a sus padres los destinos de vacaciones en la infancia. Los lunares aumentaron un 5 por ciento cada vez que fueron de vacaciones (a partir del año de edad) junto al agua. Los lunares, nevus, son un factor de riesgo de melanoma maligno, el cáncer de piel más letal.