La conciliación es muy importante durante el periodo estival. Una etapa del calendario en la que también pueden producirse numerosas variables, cambios e imprevistos. Por ejemplo, tal vez la niñera habitual tenga vacaciones durante julio o agosto. Quizá la profesional que trabaja habitualmente en el hogar ha dejado su puesto de empleo para incorporarse a otra oportunidad.
Existe una elevada oferta de profesionales competentes y cualificados que buscan empleo en el sector del cuidado infantil. La confianza es esencial para que los padres tengan la certeza de que el bebé está cuidado y acompañado. Como en cualquier puesto de empleo, existe un proceso de evaluación que analiza las competencias y habilidades de diferentes perfiles. De este modo, las familias identifican el currículum que mejor se ajusta al puesto vacante. Pues bien, existen cuatro documentos que permiten analizar la formación y experiencia de los profesionales. En Uno más en la Familia enumeramos cuatro ejemplos.
La contratación de una niñera es una de las decisiones que toman aquellas familias que priorizan esta medida de conciliación. Sin embargo, más allá del deseo de encontrar una persona cualificada y responsable, padres y madres pueden sentir incertidumbre al respecto. Existen empresas especializadas que acompañan a los clientes en esta experiencia: las agencias de niñeras están formadas por un equipo interdisciplinar. ¿Cuáles son las ventajas de buscar una cuidadora a través de este medio? En Uno más en la Familia comentamos algunos aspectos.
Contratar una cuidadora profesional es una de las decisiones que toman algunas familias. La elección del perfil buscado surge después de un proceso de selección. Es muy importante formalizar esta relación laboral por escrito mediante la redacción de un contrato. Las partes implicadas tendrán una copia con la información expuesta en este documento que regula las bases de este acuerdo. Este contrato formaliza las obligaciones y derechos de las partes implicadas en este vínculo profesional. La firma de este contrato tiene carácter legal.
El plan de conciliación laboral forma parte de la programación que las familias establecen para conciliar lo profesional con lo personal. La elección de una niñera profesional es una de las opciones elegidas por quienes desean contar con este apoyo externo. De este modo, al enumerar las competencias de la oferta de empleo, cada vez más familias valoran como un requisito muy positivo el hecho de que la persona contratada sea bilingüe. El conocimiento de un segundo idioma es importante en el mercado laboral actual.
La conciliación laboral es uno de los objetivos familiares que repercute de manera constructiva en la felicidad de padres e hijos. Por ello, cada familia debe diseñar su propio plan de conciliación observando las ventajas de esa elección a partir de un diagnóstico de las necesidades previas. Además de considerar el servicio de guardería como una posibilidad, también es posible contratar una niñera profesional. Una persona de confianza que realizará una labor muy importante.
Cuando unos padres deciden traer un hijo al mundo, uno de los grandes debates es cómo vamos a cuidarlo. Más allá de las técnicas o tipo de educación que empleemos, está también que el tiempo, al completo, va a estar dedicado a él en exclusiva, al menos durante sus primeros meses. Poco a poco, y conforme vaya creciendo, sus actividades fuera del cuidado del hogar irán encontrando otro espacio: la guardería, la escuela infantil... Pero son muchos los momentos en los que los papás, a lo largo de esa primera etapa, se encuentran con compromisos ineludibles. Es entonces cuando se necesita de un cuidador.
Si partimos de la base que no existe nadie perfecto, entonces ya tendremos un camino recorrido importante. Pero también es cierto que no podemos dejar a nuestro bebé al cuidado de la primera persona que se nos ofrezca. Buscar una niñera o canguro que cumpla ciertos requisitos debe ser fundamental, al menos para saber que se va a encontrar bien protegido, con una persona responsable y que cubra todas sus necesidades.
En ocasiones, los padres necesitan de la ayuda de una niñera para poder cuidar del pequeño puesto que no siempre es fácil conciliar la vida profesional con la faceta personal, es decir, con el cuidado del hogar. Por eso, las cualidades principales de una niñera son la seriedad, la confianza y la profesionalidad. En este sentido, dichas cualidades pueden conocerse más de cerca si cuando hacemos una entrevista a una persona, le pedimos referencias donde podamos conocer dónde ha trabajado anteriormente.
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