Una de las recomendaciones que puedes integrar en cualquier viaje es solicitar información sobre lugares de interés que destacan en la zona. Por ello, la Oficina de Turismo es un punto de referencia para cualquier visitante. Pues bien, los museos, al igual que otros edificios emblemáticos, destacan en la oferta cultural del entorno.
Visitar un museo es una experiencia de ocio cultural que muchas familias organizan durante el fin de semana. Es una iniciativa que transmite el humanismo y el valor de la cultura a quienes reciben el alimento del conocimiento artístico. Un museo es una institución que tiene un impacto positivo en la vida académica, familiar y social. Por ello, es un espacio abierto que está en comunicación permanente con otros organismos y entidades.
Los museos acercan una agenda de exposiciones a familias que comparten esta experiencia cultural durante el tiempo libre. Muchos de estos espacios cuentan, además, con una tienda que presenta un atractivo catálogo de regalos artísticos. A lo largo de este paseo por este punto de venta se prolonga este encuentro con el arte. Allí es posible comprar detalles tan sencillos, pero valiosos, como postales inspiradas en obras de autores célebres.
El Museo del Prado celebra su bicentenario. El museo está abierto de lunes a sábado en horario de 10.00 a 20.00 horas. Este espacio cultural cierra sus puertas en domingos y festivos a las 19.00 horas. El horario gratuito para visitar el Museo del Prado es de lunes a sábado de 18.00 a 20.00 horas. En el caso de programar la visita en domingos y festivos, este horario es de 17.00 a 19.00 horas.
La época de vacaciones escolares puede ser un buen momento para visitar con los niños lugares únicos y estupendos en los que, además de divertirse, también puedan aprender. Uno de esos lugares son los museos. Pero para que resulte interesante al público más pequeño, es necesario que estén dedicados a temas sorprendentes y que les animen a explorar y querer saber más. Sólo así conseguiremos que tengamos una visita agradable toda la familia.
Hoy, 18 de mayo, se celebra en todo el mundo el Día Internacional de los Museos. Una excusa perfecta para acercarnos a ellos y en los que podemos encontrar un manantial inagotable de sabiduría, belleza y diversión. Porque aunque parezca que estos suntuosos edificios sólo han sido creados para las mentes más brillantes o los eruditos y expertos, tal es su variedad y cercanía que el público en general seguro que se encuentra fascinado ante tanta maravilla. Por eso los niños son, sin duda, sus visitantes más deseados y que más partido pueden sacarles.
Cuando llega el fin de semana lo habitual es que estemos cansadísimos y nos apetezca tirarnos en el sofá a ver una peli con los peques. Aunque el plan es estupendo, los niños se recuperan más rápido que nosotros y necesitan salir y descargar energía. Además, las salidas en familia son muy enriquecedoras, es tiempo de calidad entre padres e hijos y siempre aprendemos algo nuevo.
Enseñarle a los niños que los museos no son sitios aburridos es brindarles la posibilidad que en un futuro puedan ampliar notablemente sus conocimientos y sus ganas de conocer mucho más acerca de la historia, el arte y las distintas ciencias.
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