Los huevos cocidos suelen ser bien aceptados por los niños, por su sabor pero también por la textura. Además son un buen punto de partida para hacer recetas sanas y divertidas, como ya vimos en el caso de los pollitos en el cascarón. Con el calor son un plato fresquito que podemos complicar todo lo que queramos y con el que los niños nos pueden ayudar.
Si ayer os contábamos algunos trucos para que la comida no sea un auténtico infierno con y para esos niños que son rebeldes sin más, hoy le toca el turno a los niños que se eternizan cada vez que tienen un plato de comida delante. Y es que como decíamos, es importante tratar de que la comida se convierta en un juego, siempre que sepan y entiendan su importancia, y que la mesa no se convierta en el campo de juegos de tu bebé.
Darle de comer a nuestros pequeños platos completos y equilibrados es una de las máximas preocupaciones de las madres cuando sus hijos empiezan a adentrarse en el mundo gastronómico. A veces rechazan alimentos por su textura, otras veces por su sabor y, en ocasiones, es la apariencia la que les echa para atrás. De ahí que haya que echarle mucha imaginación, en especial cuando empiezan a comer sólidos para que aprendan a comer de todo.
La alimentación de los bebés cuando empiezan a comer es uno de los principales quebraderos de cabeza de los padres. dudas que se acrecientan si eres mamá primeriza. Qué puede o no puede comer, si le gustará o no, si será fácil de preparar… son algunas preguntan que surgen con frecuencia.
La dieta es uno de los cuidados principales durante el embarazo. Debería mantenerse una dieta equilibrada en la que no falte ningún grupo alimentario, aunque cada uno en la proporción adecuada. El agua es el complemento imprescindible y tendríamos que consumir al menos dos litros diarios. Cuanto más alto esté un alimento en la pirámide alimentaria, menor debería ser la cantidad consumida.
Llevar a los niños al teatro o escoger una buena película adecuada para ellos, no siempre es una tarea sencilla, sobre todo porque, si son muy pequeños, les resultará complicado aquello de mantener la atención o, si ya son más mayorcitos, pueden acabar aburriéndose con temas que, quizás, les parezcan demasiado "infantiles". Por eso una buena alternativa y que nunca falla, tengan la edad que tengan, es el mundo de la magia.
Si piensas en organizar la fiesta de bienvenida para el bebé, es importante tener en cuenta además de las invitaciones y la decoración, la comida o pasabocas que os gustaría ofrecer a los invitados; el baby shower no es una reunión que exija una comida demasiado elaborada ni pesada, así que se puede pensar en un menú simple, variado y ligero de dónde escoger.
Acaba de hacerse público un estudio realizado por la Federación Española de Asociaciones Dedicadas a la Restauración Social (FEADRS) y cuyo resultado ha hecho público el salón de Equipamiento para Hostelería (HOREQ) de Ifema. Los datos que manejan se basan, sobre todo, en los reunidos a través de los usuarios infantiles del comedor escolar.