Desde el momento del nacimiento del bebé y durante la infancia, pueden aparecer manchitas de diversas tonalidades, formas y tamaños en la piel del bebé; la mayor parte de ellas son inofensivas y no requieren tratamiento. Algunas desaparecen solas con el paso del tiempo y otras necesitan aplicación de ungüentos o cirugías para ser removidas, por este motivo es importante acudir al pediatra y consultar con él la naturaleza de la mancha, para saber qué hacer al respecto.
El cloasma o melasma es la aparición de una pigmentación moteada o en parches en la piel de la cara. Estas alteraciones del tono de la piel suceden con frecuencia aunque no exclusivamente a las embarazadas. Se conoce también como máscara del embarazo. Las manchas aparecen en las zonas de la cara más expuestas al sol, pómulos, frente, nariz y labio superior. Suelen salir en ambos lados de la cara de forma simétrica.