Todavía son muchos los padres que tienen sus reticencias a la hora de escolarizar a sus hijos. La mayoría de ellos quieren educar a sus pequeños a su lado, hasta el máximo tiempo que indica la ley. Sin embargo, lo que parece que puede ser una decisión sin más transcendencia, sólo movidos por una necesidad laboral o un simple capricho, tiene más consecuencias de lo que podríamos imaginar, y todas ellas positivas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) vuelve a incidir en la necesidad de crear un ambiente más sano y limpio para que los niños puedan crecer en salud. Para ello no duda en darnos a conocer las cifras que se manejan en torno a este hecho y que resultan algo más que escalofriantes. Cada año fallecen en todo el mundo 1,7 millones de niños por causa de la contaminación, lo que supone que, al día, 4.657 menores pierdan la vida por esta causa.
El peso de las mochilas escolares, los cambios en el crecimiento o las malas posturas diarias suelen ser algunos de los problemas que consiguen que nuestros niños se quejen de un continuo dolor de espalda. Pero, aunque pueda ser algo dentro de la normalidad, lo cierto es que deberíamos prestarle más atención de lo que lo hacemos. Un estudio realizado en Estados Unidos, nos alerta de que estas dolencias infantiles son más habituales de lo normal y que, además, apenas le prestamos la atención que necesita.
Se acaban de conocer los datos recabados por Eurostat, entre los países de la Unión Europea, con respecto a la edad en la que las mujeres europeas tienen su primer embarazo. Según las cifras que manejan, España estaría a la cabeza, junto a Suiza, en el aumento de edad para ser madres. Si bien la media del resto de países se sitúa en los 30.4, nuestro país está, en la actualidad, en 31.8, edad que ha aumentado de forma considerable en los últimos años.
Unicef acaba de presentar un informe en el Congreso de los Diputados que lleva por título "Equidad para los niños. El caso de España". En el se refleja como la desigualdad infantil en nuestro país se ha convertido en uno de los temas más olvidados por los políticos españoles. Según las cifras que se manejan, uno de cada tres niños españoles viven en riesgo de pobreza o exclusión social. Tema tan grave al que hay que poner soluciones de inmediato.
Ya hace algunos años que el mayor estamento sobre la salud mundial nos está alertando sobre el alto índice de personas con sobrepeso que se encuentran en los países desarrollados, y en aquellos en vías de desarrollo, así como las graves consecuencias que ello supone para su salud. Sin embargo, esta cifra en vez de descender, cada año consigue elevarse, lo que supone un grave riesgo, especialmente en la población infantil que, al parecer, es la más afectada.
Con motivo de la Semana de la Lactancia Materna, que se celebró el pasado mes de octubre, el Comité de Lactancia Materna, de la Asociación Española de Pediatría, junto a otros organismos, han realizado un informe en el que se comprueba como más de la mitad de las mujeres dejan la lactancia al volver al trabajo. Por ello, el lema que se ha utilizado durante este año ha sido "Amamantar y trabajar ¡logremos que sea posible!".
Uno de los artículos que aparecen en nuestra vida con la llegada del bebé, y que le acompaña durante sus primeros años, son los pañales. Del mismo modo que nuestro pequeñín come, respira o derrama lágrimas ante cualquier eventualidad, también expulsa esos deshechos sin poderlos controlar, por lo tanto necesitamos que siempre estén controlados.