Cómo evitar la retención de líquidos
El día de hoy te brindaremos algunos consejos para que puedas evitar y combatir la molesta retención de líquidos que puedes sufrir durante el embarazo.
El día de hoy te brindaremos algunos consejos para que puedas evitar y combatir la molesta retención de líquidos que puedes sufrir durante el embarazo.
Con la llegada del verano y las altas temperaturas suele ser habitual que nuestros pies sufran, mucho más si estás embarazada y en los últimos meses de gestación. El peso, los problemas de circulación y la retención de líquidos se unen al calor para que nuestros pies aumenten su tamaño de forma considerable, de hecho a veces es bastante complicado calzarse adecuadamente.
El edema o retención de líquidos es una de las consecuencias visibles más frecuentes durante el embarazo. Generalmente se manifiesta por la hinchazón de determinadas partes del cuerpo, especialmente en los tobillos. Y se produce debido al aumento de líquidos que genera el organismo como consecuencia de la revolución hormonal. De esta forma, estos líquidos que circulan por la sangre se traspasan a las células provocando entonces que se dilaten y consigan el visible hinchazón.
Es posible que durante el embarazo te encuentres con frecuentes e intensos dolores en la mano, así como un hormigueo en la palma y en los dedos índice, medio y anular. No en vano, según las estadísticas, son un 2,5 por ciento de gestantes que sienten estas molestias, especialmente durante el último trimestre. Lo notarás en la dificultad para cerrar el puño o tomar cualquier objeto, además de tener una sensación, especialmente molesta, como de hinchazón o ardor en los dedos.