Las embarazadas invidentes podrán tocar a su bebé antes de nacer
Uno de los instantes más mágicos y maravillosos cuando estamos embarazadas es aquella en el que la ecografía nos muestra la imagen de nuestro bebé. Su carita, las manos, los pies... saber que ese cuerpecito está en nuestro interior, flotando felizmente, y al que ya intentamos buscar parecidos. Instante excepcional que, por desgracia, algunas mamás no consiguen, como es el caso de las invidentes.