La decoración de la habitación de un niño es algo en lo que tenemos que invertir gran parte de nuestros recursos, pues es uno de los espacios más importantes del hogar; es un lugar para aprender, soñar, crecer y jugar y donde la creatividad y, sobre todo, la ayuda del propio niño, será de vital importancia.
Acabamos de conocer el resultado del Primer Estudio sobre la Vitalidad en España, realizado por Zespri. Aunque se ha realizado en todo el conjunto de la población, tiene vital importancia conocer los datos que nos hablan de los niños, ya que en ellos es donde encontramos el índice de vitalidad más importante.
Seguro que más de uno ha sufrido una rabieta y no me refiero a una suya, sino a una protagonizada por nuestro hijo o hija. Hay veces que somos capaces de anticiparnos a ellas y otras, nos pillan por sorpresa. Cuando queremos darnos cuenta estamos ante la “niña del exorcista “o “el niño convertido en diablo de Tasmania”. ¿Y qué hacemos entonces?
Ser madre es una de las experiencias más maravillosas que puede experimentar una mujer, sin embargo no siempre se vive con la plenitud y tranquilidad que merece. Son muchas los cambios y situaciones novedosas que nos hacen tambalear el ánimo, angustiarnos y vivir con cierta desazón esos momentos que van entre el próximo momento del parto y los primeros días del bebé en casa.
Volver a la rutina y retomar los hábitos nos suele dar a todos un poco de pereza. Dejar atrás el verano y volver a madrugar puede ser un poco costoso al principio. Sin embargo, si somos capaces de motivar y despertar la ilusión por la vuelta al cole a los más pequeños, seguro que se les hará más llevadero.
Hace unos días tuvimos la desgracia de sufrir un atentado terrorista en Barcelona. Lamentablemente no se trata de un hecho aislado, ya que son muchos los actos de violencia, e injustificada agresión que se viven en los últimos tiempos. Hechos totalmente incomprensibles que ponen en peligro la integridad física y psíquica de una población cuyo objetivo sigue siendo convivir en paz bajo el amparo del respeto.
La infertilidad en las parejas, la compasión ante un niño abandonado o la solidaridad con el género humano, son algunas de las causas que pueden llevar a una familia a lanzarse al acogimiento de un niño. La adopción es un acto de generosidad en el que el amor debe estar presente en todo momento. Abrir nuestra casa y nuestro corazón a un ser totalmente indefenso, y darle lo mejor de nosotros, es convertir al mundo en un lugar mucho más habitable, generoso y hermoso.