Una de las aficiones que podemos fomentar en nuestros niños es la de la cocina. Está demostrando que aquellos pequeños que ayudan en la preparación del menú familiar, tienden a ser mejor comedores, y más equilibrados, que los que no. Por eso, dentro de las tareas del hogar, o como una afición más para realizar en casa, podemos invitarles a que nos ayuden a preparar las comidas de casa, algo que agradecerá su imaginación y, también, su salud.
Uno de los alimentos que nos acompaña durante toda nuestra vida, a no ser que tengamos algún tipo de intolerancia, es el arroz. Es uno de los cereales más completos y que nos ofrece una gran variedad en su presentación. Todas las culturas nos ofrecen estupendas recetas cocinadas con arroz y difícil es encontrar alguna receta que no nos venga bien al paladar.
Una de las grandes preocupaciones de los últimos tiempos es la de ofrecer una buena alimentación a nuestros niños. Aunque esta tarea corresponde, principalmente, a los padres, también es cierto que las modas, las prisas o esta forma de vivir tan, a veces, descabalada, nos empuja a seguir ciertas tendencias que no resultan nada sanas. La comida rápida, el exceso de azúcares o la casi invisible presencia de frutas y verduras, son algunas de esas lacras que consiguen crear niños con problemas de salud derivas de una deficiente alimentación.
Llegado el tiempo de volver al cole y estando en las puertas de un nuevo otoño, las distintas cadenas de televisión empiezan a ofrecer nuevos programas de entretenimiento para todos los gustos y edades. Y son precisamente los más pequeños a los que, generalmente, se les ofrece un abanico más amplio convirtiéndolos en un público fiel que seguirán atentos durante este nuevo periodo.
Casi todos los niños, de forma generalizada, le tienen una especial aversión a cierto tipos de alimentos. De todos las verduras son los que se llevan la palma, y es que es extremadamente difícil encontrar a un niño que le cueste trabajo, y a los padres horas de paciencia, llevarse un trozo de verde a la boca. Menos mal que siempre podemos encontrar trucos con los que animarles a que las tomen, sobre todo porque son totalmente necesarias para su desarrollo.
Es una suerte que vayan saliendo al mercado nuevos aparatos para realizar las tareas del hogar con más facilidad y que, al mismo tiempo, nos ahorran un tiempo considerable. Cuando un niño aparece en nuestra casa, de repente, todo se llena de nuevos trastos: mobiliario, juguetes, electrodomésticos... y casi necesitamos ampliar la vivienda para poder instalar todo lo que vamos a ir necesitando durante, al menos, los primeros años.