Cocinar es una buena manera de divertir y entretener a los niños. Aunque procuremos que lleven una dieta sana, de vez en cuando es bueno que también tengan su ración de capricho. Privarles del dulce sólo hará que lo deseen con más ganas y cuando tengan oportunidad se den un atracón. Además el azúcar es imprescindible en su alimentación, siempre con moderación.
Aunque lo de famosa os suene raro, la Tortuga Gertrudis, pese a ser un animalillo destinado a saciar el hambre de la gente más menuda, y la no tanto, tiene ya su club de fans en internet. Y es que en la era digital no nos deben extrañar estas cosas. Sea como fuere, esta tarta es conocida en medio mundo.
Ya que disfrazamos a nuestros niños con motivo de Halloween, bien para el cole o para una fiesta con sus amigos, podemos aprovechar para decorar la casa y cocinarles algo especial que tenga que ver con el tema. Podemos pedirles ayuda o hacerlo sin que lo sepan para darles una sorpresa, en cualquier caso les encantará. La receta de hoy es larga y un poquito entretenida, pero no necesita horno y es fácil.
Una de las chucherías favoritas de los niños y que no deja de ser un buen alimento, siempre controlado y mucho mejor si es casero, son las palomitas de maíz. Es uno de los símbolos inequívocos de que vamos a disfrutar de una buena película, por ejemplo, o un complemento más dentro de una fiesta infantil donde queremos ofrecerles, además de una nutritiva merienda, algo especial que les sacie su apetencia de golosinas.
Uno de los alimentos que no suelen faltar en nuestra despensa y que forman parte de la variedad del desayuno o las meriendas son las magdalenas. Las podemos encontrar envasadas en el supermercado o en las panaderías y pastelerías recién hechas y asegurándonos que han sido elaboradas de forma artesanal y con ingredientes naturales. Pero si ya queremos controlar cada uno de sus componentes y, además, pasar un rato divertido con los niños en la cocina, entonces podemos fabricarlas nosotros mismos.
Si quieres preparar una fiesta de cumpleaños distinta y original, quizás deberías empezar por ofrecer un menú distinto y diferente, eso sí, siempre sin descuidar que los alimentos ofrecidos sean sanos y muy nutritivos. Unos bocadillos de fiesta, saladitos de jamón york y queso o barcos de ensalada pueden ser unas buenas meriendas que recarguen de energía a los pequeños comensales. Pero no vamos a negar que, si bien no debe ser alimento principal ni diario, no hay fiesta infantil que se precie sin sus deseadas chucherías.
Uno de los alimentos favoritos de los niños son las galletas. Podemos ofrecérselas para el desayuno y también para la merienda y es un complemento ideal para los postres o para mitigar esos deseos de comer dulces o chucherías fuera de las comidas. Es cierto que en el mercado existe una gran variedad de este alimento y que se ajustan tanto a gustos como a necesidades específicas (para celíacos, diabéticos...) pero también es verdad que, a los que nos gusta experimentar en la cocina y que nuestros niños nos ayuden, resulta ser un entretenimiento divertido y muy sano.
Ya sabemos aquello de que no es recomendable abusar de los dulces, ni de las golosinas, ni de todo aquello que aporta muchas calorías y pocos nutrientes. Es cierto que debemos enseñar a nuestros niños a que deben llevar una dieta sana y equilibrada en la que primen las frutas y las verduras, pero también es verdad que, de vez en cuando y sin abusar, un capricho dulce tampoco nos viene mal.
Han sido muchas las ocasiones en las que os hemos ofrecido recetas divertidas, sencillas y llenas de colorido para amenizar una comida o merienda para los niños. Es importante, cuando se trata de los más pequeños, que la comida ofrecida no se quede incrustada en el plato de forma rutinaria y vulgar, a todos nos gusta, y mucho más a los niños, la variedad y el atractivo visual, sobre todo para aquellos que les cuesta especialmente comer.
Se acerca el verano y niños y mayores se pasan el día comiendo helados. Es raro que a alguno no le gusten. Y qué mejor manera de saber lo que están comiendo y que estén alimentados que haciéndolos vosotros mismos. Los helados pueden ser nutritivos y muy divertidos de preparar, por lo que tu pequeño gourmet te podrá ayudar.
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