Seguimos respasando aquellas canciones que los papás y mamás artistas han dedicado a sus hijos. Y es que un acontecimiento tan importante como es la de enfrentarse a la paternidad, no puede ser pasado por alto en aquellas almas sensibles que se dedican al mundo del arte, en concreto al de la música.
Los papás y mamás artistas lo tienen mucho más fácil cuando quieren decirle a sus niños lo mucho que les quieren. Es así como los poetas escriben versos sublimes, los pintores esbozan maravillosos cuadros y los músicos estupendas melodías. Así vamos conociendo preciosas canciones que, como generosos himnos de amor, también las hacemos nuestras.
Uno de los cantantes españoles con mayor proyección más allá de nuestras fronteras es Alejandro Sanz. Un cantautor que ha sabido aunar el sentimiento más hondo con las melodías más actuales y también las más clásicas. Artista completo y lleno de sensibilidad, no era de extrañar que cuando sucediera algo en su vida, tan importante y relevante como el hecho de ser padre, quedara plasmado en una de sus obras musicales.
¿Alguna vez te has planteado poner letra a todo ese amor que sientes hacia tus hijos? Sin duda es una de las cosas más complicadas que podemos hacer en la vida, poner palabras a los sentimientos, mucho más cuando se trata de esa entrega voluntaria e ilimitada que sentimos hacia nuestra propia sangre. ¿Cómo expresar, por ejemplo, todo el amor que sentimos por nuestros hijos?
Los padres artistas lo tienen muy sencillo para expresar a sus hijos todo el amor que sienten por ellos. Es así como los poetas escriben sus poemas, los pintores les realizan bonitos retratos y los músicos componen canciones especialmente dedicados a ellos. Arte del que luego, también nosotros, nos podemos aprovechar ya que ese sentimiento es totalmente universal.
Uno de los lenguajes, por no decir el único, más universal es el de la música. A través de ese mágico conjunto de sonidos, somos capaces de compartir sentimientos, demostrar emociones o sacar a la luz todo ese pontencial de amor que se cobija en nuestro interior. La música es el vehículo perfecto para hacer llegar al mundo esa realidad, casi mágica, que fluye desde nuestra visión emocional.
Los papás artistas tienen una ventaja frente a los que no lo somos, y es poder dedicarles hermosas composiciones, ya sean musicales, poéticas o pictóricas, a sus retoños. Algo que, al mismo tiempo, nos beneficia a todos pues, a partir de su inspiración, también nosotros compartimos ese inmenso amor por los hijos. Esos pedazos nuestros que siguen libres su camino cuando ya les crecen las alas.
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