¿Querrá a la niñera más que a mí?
Esta supuesta rivalidad que sentimos a veces puede tener su origen en una mala relación y, en ciertas ocasiones, la causa directa, a veces no confesada de optar por una guardería. Pero la baby-sitter no es una rival en absoluto, es una colaboradora nuestra. Y que nuestro hijo la quiera no sólo es bueno sino que incluso es necesario, y como madres debemos entenderlo y asumirlo desde un primer momento.