Una de las prácticas más generalizadas durante el periodo de gestación es la de iniciarnos en la aventura de realizar, con nuestras propias manos, el ajuar del bebé. Pequeñas chaquetas de punto, gorritos de lana o mantitas para arroparlos del frío, son algunas de esas tareas que nos mantienen, no sólo entretenidas si no, también, en contacto directo con el futuro recién nacido.
Las ideas más sencillas son las que propician inventos más útiles en muchos casos. Son esas cosas que cuando las ves no puedes creer que nadie las desarrollara antes. Es el caso de Doubby, una innovación de Suavinex muy práctica pero muy simple. Por ello fue reconocida como finalista de los premios Innovation Awards en la Feria de Colonia en 2009
Si eres una madre experimentada, ya sabes que salir de casa con un bebé acarrea una serie de procesos que puede llegar a saturar. Por ese motivo, hay que intentar llevar las menos cosas posibles, aunque sin olvidarse de las imprescindibles. Y, dentro de estas últimas, sólo debemos cargar con las más prácticas y las menos pesadas.
Cuando llega un bebé a casa nos volvemos locos mirando repita para ellos, primero las cosas básicas que van a necesitar, luego lo que te van regalando y poco a poco vas haciéndote una experta en lo que a moda de bebé se refiere. Navegando por la Red nos hemos encontrado con una tienda francesa que hace la repita de bebé de siempre, pero en texturas muy cuidadas y adaptable a la vida moderna. Eso sí con un toque chic muy sofisticado.
Cuando una mujer se convierte en mamá celebra con especial emoción el primer Día de la Madre. Una celebración que requerirá del esfuerzo del padre porque el bebé será demasiado pequeño para encargarse de hacerle un regalo a mami.
El mundo del diseño para los más pequeños de la casa nos ofrece, cada día, una serie de propuestas que, intentando ser prácticas, no quieren abandonar al mismo tiempo el mundo de la diversión y de los personajes infantiles que más puedan gustar a los pequeños. Es por eso que, ante este invento japonés, no sabemos si tratarlo como un babero al uso, un protector gorro o, simplemente, un sencillo y práctico disfraz con el que convertir a nuestro niño en un héroe manga.