Suecos y noruegos son los papás más comprometidos
La economista española Almudena Sevilla-Sanz, de la Universidad de Oxford, ha realizado un estudio para conocer si las tasas de matrimonio y convivencia se relacionan con la actitud de los hombres hacia las tareas del hogar y el cuidado de los niños. El resultado es que en los países en que los hombres comparten las tareas del hogar y la atención a los pequeños, las mujeres están más dispuestas a vivir en pareja o casarse.
La autora del estudio explica que, «esto lleva a que los hombres en las sociedades igualitarias adopten un papel más doméstico, así que la probabilidad de formar un hogar armonioso es mayor, lo que resulta en una mayor proporción de parejas que establecen un hogar en estos países».
A la cabeza de los hombres más «deseados» están los suecos y noruegos, seguidos por británicos, estadounidenses e irlandeses. En el otro extremo se sitúan los alemanes, japoneses, austríacos y en último lugar los australianos, de los que ya conocemos su afición por el deporte y la cerveza. Los hombres españoles están en mitad de la tabla.
Se consultó a los hombres por el tipo de mujer que buscan para formar pareja y como era previsible, ellos se decantan por mujeres en las que se pueda confiar y se hagan cargo de la casa y los niños. «Al igual que los hombres igualitarios parecen ser vistos como una opción mejor para las mujeres, las mujeres igualitarias son vistas como una apuesta menos segura por parte de los hombres».
¿Cuándo se darán cuenta esos hombres que los hijos son de los dos y que ellos usan y manchan igual o más que las mujeres? Con estos planteamientos la igualdad y la conciliación aún no son más que utopías en nuestro país.
Vía | 20 minutos
Foto | Caring Baby gifts blog
Noticias Padres y madres #conciliación #hogar #igualdad #pareja
un comentario
por lo que leí en el blog de una sueca las mujeres suecas deben ser unas brujas por como tratan a los hombres y con el resultado de que los tipos suecos solo les terminen hablando cuando están borrachos o les tengan miedo