Semanas y no meses

“¿De cuántos meses estás? Estoy de 30 semanas. A mí dímelo en meses, que si no, no me entero”. Cuando te embarazas, además de descubrir nuevas sensaciones, síntomas y un montón de cosas que antes no sabías, también te das cuenta de que no se habla de meses, se habla de semanas.

Una de las preguntas más repetidas y a la que tienes que saber responder cuando estás embarazada es: ¿cuál fue el primer día de la última regla? (recomendación, llevad bien apuntado cuándo os baja la menstruación), porque en función de esa fecha será cuando la matrona, el ginecólogo, el obstetra,… calcularán la FPP (Fecha probable de parto) y cuando empezaremos a hablar de semanas. Además, en base a esa fecha se irán realizando todos los controles (ecografías, análisis, pruebas,…).

Si el primer día de la última regla fue el 7 de noviembre, la FPP será 40 semanas más tarde, es decir, el 14 de agosto (en Internet puedes comprobarlo en los múltiples calculadoras que hay. Será entonces cuando popularmente se hable de “salir de cuentas”. Se supone que la fecundación se produce en el día 14 del ciclo (normalmente, de 28 días), pero como no siempre es así – puede ser antes o después – la medida estándar establecida para predecir el parto son las 40 semanas o 10 ciclos lunares. Y se denomina edad gestacional.

Hay revistas y libros que le quitan esas dos semanas de más que se suelen añadir y a veces nos confunden un poco, así que os recomiendo que siempre tratéis de buscar todo lo relativo a edad gestacional y cuando os pregunten, hablad en semanas, porque decir que estás de 20 semanas, no siempre significa estar de cinco meses.

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