Seis razones para crear una biblioteca infantil en casa
Los lectores pueden encontrar un extenso catálogo de obras en librerías y bibliotecas. Pero en el propio hogar también es posible crear un pequeño rincón literario que esté específicamente diseñado para disfrutar de los cuentos, las aventuras y las historias infantiles. En El Blog Infantil compartimos seis buenas razones para diseñar una biblioteca en una estancia de la casa.
1. Ordenar el material disponible
Esta es una de las principales razones: clasificar el material y organizarlo en un entorno perfectamente estructurado es clave para disfrutarlo verdaderamente. En caso contrario, un libro puede pasar desapercibido cuando no se encuentra en un lugar visible.
2. Accesibilidad
La biblioteca ubicada en el barrio destaca por su cercanía respecto al propio domicilio. La dirección de las instalaciones facilita el desplazamiento para coger libros en préstamo, sin tener que realizar un largo trayecto. Pues bien, un espacio de biblioteca en casa ofrece un mayor nivel de cercanía y accesibilidad.
3. Animación a la lectura a largo plazo
El catálogo de obras se convierte en el complemento ideal de un rincón de lectura que ha sido específicamente diseñado para alimentar la imaginación, potenciar la comprensión lectora e interactuar con los libros. El lector tiene la posibilidad de seleccionar un material que llame su atención. La biblioteca es un espacio dinámico, es decir, puede ampliarse y actualizarse con nuevos ejemplares adaptados a la edad del lector.
4. Un catálogo que tiene un valor emocional
Una biblioteca casera es especial por diferentes motivos. Más allá de la calidad de la obra, cada publicación posee una historia única que conecta con el propio contexto familiar. Por ejemplo, algunos libros se convierten en el recuerdo de diferentes celebraciones de cumpleaños. Otros están personalizados con una bonita dedicatoria. Algunos libros conectan con viajes a destinos estivales. Otras obras muestran la huella del paso del tiempo en sus páginas o en su portada.
5. La opción ideal para releer un libro
Una obra infantil presenta diferentes lecturas. Es decir, la experiencia literaria se enriquece más allá de la primera impresión. Una biblioteca casera está integrada por una selección de obras cuidadosamente elegidas. La accesibilidad de las obras es clave para potenciar la animación a la lectura y su relectura posterior. De este modo, es posible redescubrir el argumento y los matices desde otro ángulo.
6. La preparación del entorno influye en el fortalecimiento del hábito
El descubrimiento y mantenimiento del hábito de la lectura se enriquece con diferentes experiencias que giran en torno al libro. Pues bien, la propia disposición del hogar puede preparar el espacio para alimentar el interés por los cuentos, la poesía y las aventuras presentes en los libros. La biblioteca infantil es el punto focal de un rincón de lectura o un componente más del cuarto de juegos.
Además, crear una pequeña biblioteca es un proyecto familiar que une a padres e hijos y propicia la implicación del propio niño.
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