Sauna y jacuzzi durante el embarazo

Cuando estamos muy cansadas luego de un día de muchas actividades relajarnos en una tina parece ser la manera ideal, pero si estamos embarazadas debemos buscar otros métodos, ya que la mayoría de los médicos recomienda que este tipo de ámbito no es el más adecuado.

Las temperaturas que existen en los saunas o jacuzzis pueden llegar a convertirse en un peligro para las embarazadas y sobre todo para los bebés que llevan en su vientre. Durante el periodo de gestación el organismo ya tiene trabajo extra y si exponemos un organismo a temperaturas elevadas esto puede interferir en el crecimiento del bebé.

También es cierto que muchas bañeras y jacuzzis cuentan con la posibilidad de disminuir las temperaturas pero es preferible elegir otros métodos para distenderse, como el yoga, los baños de agua tibia normales o los masajes realizados por profesionales.

Si nos referimos puntualmente a los saunas esto puede causar hipertermia, lo que provocaría problemas en el desarrollo del bebe, sobre todo durante los primeros meses de gestación. Además el exceso de sudor causaría deshidratación e hipotensión (la hipotensión puede inhibir la llegada del flujo sanguíneo al bebé).

Si lo que estas pensando es darte un baño de inmersión con agua demasiado caliente debes tener presente que la temperatura de tu organismo también aumentará con solo estar 10 minutos sumergida. Las bañeras con hidromasaje se relacionaron en su momento con la posibilidad de tener pequeños con defectos cerebrales y espinales. Esto fue publicado en e3l año 1992 por el Diario de la Asociación Medica de los Estados Americanos. También se encuentra vinculado el uso excesivo del hidromasaje con los abortos involuntarios, pero las conclusiones de las investigaciones al respecto no brindan datos concluyentes al respecto.

Vía | American Pregnancy
Foto | Flickr – Trendmatcher

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