El resfriado durante el embarazo, cuidados básicos

El invierno es una época en la que proliferan los resfriados, mucho más si nos encontramos bajas de defensas, algo que puede ocurrir cuando estamos en pleno proceso de gestación. Por eso es importante seguir algunos cuidados básicos para evitar el contagio, especialmente cuando se trata de la gripe, pero si ha sido inevitable, también podemos llevar a cabo algún que otro truco para, al menos, sentirnos más aliviadas.

Lo primero que tenemos que hacer es acudir a nuestro ginecólogo, especialmente si viene acompañado con algún acceso de fiebre. No debemos olvidar que ciertos fármacos son contraproducentes durante el embarazo, así que sólo él es el indicado para aconsejarnos que podemos tomar y que no. El paracetamol, tomado en pequeñas dosis, nos puede ayudar pero siempre que sea nuestro médico el que lo estime oportuno.

Algunos remedios caseros que nos pueden ayudar a aliviar los síntomas son, por ejemplo, las gárgaras de bicarbonato que nos ayudan a suavizar la garganta, así como algunas infusiones (consultar antes con el médico cuales pueden ser las más adecuadas) o el preparado de agua, zumo de limón y miel. Para la congestión nasal nada mejor que el suero fisiológico o el agua marina. Además te puede venir estupendamente tener en casa ya que en cuanto nazca el bebé vas a necesitarlo a menudo.

Y, como siempre, la base de toda prevención pero, también de curación, es llevar una alimentación rica en vitaminas y nutrientes. Las verduras y las frutas frescas siguen siendo un salvaguarda segura de nuestra salud. Así que aprovecha que estamos en temporada de frutas que contienen vitamina C en grandes cantidades y no dejes de tomar buenos zumos de naranja o pomelo siempre que puedas.

Vía | Ser Padres
Foto | Aló

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