Actividades extraescolares deportivas
. Es importante no olvidar el tiempo que deben tener para descansar y divertirse, porque aprender está bien pero el juego forma parte de dicho aprendizaje y sobre todo es un derecho del niño.
Tan importante como cultivar la mente y aprender informática, inglés o chino, es que los niños tengan la posibilidad de ejercitar su cuerpo. Hay tantos deportes como tipos de niños, por lo que siempre habrá alguno que encaje con el más travieso, el más torpón o el más rápido. Además, en muchos casos, es posible empezar con el curso avanzado, por lo que si no lo hemos tenido en cuenta en septiembre, podemos apuntarles ahora.
Siempre respetando los gustos del niño, podemos orientarle hacia los deportes que pueden dársele mejor o por el contrario, hacia aquellos que pueden ayudarle a reforzar lo que se le da peor. Por ejemplo si tenemos un niño al que le cuesta relacionarse, podría ser interesante que participe en un deporte de equipo. Y siempre deberíamos entenderlo como un entretenimiento y no como la posibilidad de tener al próximo Rafa Nadal en casa. Si fuera así, estupendo, pero no debería ser la meta principal.
Es importante equipar bien al niño para reducir las posibilidades de lesión, como también lo es estar preparados para los pequeños golpes y caídas inevitables en cuanto hacen algo de ejercicio. Nuestro botiquín básico tendría que contener un antiséptico para limpiar las heridas y tiritas, que tienen un mágico efecto sobre cualquier pupa. También tendríamos que llevar siempre a mano Calmatopic stick, el stick de la rana, que gracias a los ingredientes naturales de los que se compone: harpagofito, árnica y matricaria marítima, refresca y alivia la piel enrojecida. Es algo más grande que una barra de labios por lo que incluso puede ir en la bolsa de deporte con el resto del equipo.
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