Rendir homenaje a una persona fallecida: 5 ideas para familias
La conexión emocional y afectiva con un ser querido va más allá del impacto que produce la muerte. Rendir homanaje a su recuerdo es un deseo habitual en amigos, familiares y personas cercanas. En el día 1 de noviembre, el duelo, la vida y la muerte adquieren una mayor trascendencia en una sociedad en la que la finitud de la existencia parece pasar desapercibida en el día a día. ¿Cómo rendir homenaje y amor al recuerdo de un ser querido fallecido? En El Blog Infantil compartimos 5 ideas para familias con niños y adolescentes.
1. Vivir desde una nueva perspectiva: una existencia consciente
Cuando un ser querido fallece, podemos redescubrir el tiempo desde una dimensión más profunda. Esos minutos que tantas veces pasan desapercibidos o no se aprovechan plenamente, adquieren una mayor relevancia cuando la vida se experimenta como un regalo y un tesoro en primera persona. Es decir, rindes homenaje a la vida de un ser querido cuando intentas cultivar tu propia felicidad.
2. Hacer algún proyecto que esa persona no pudo llevar a cabo
Tal vez ese familiar siempre quiso visitar un lugar que quedó pendiente en su lista de viajes. A lo mejor hablaba con insistencia de un tema que era importante para él. Pues bien, su propia experiencia de vida puede transformarse en un motor para rendir homenaje a su memoria. Por ejemplo, si esa persona estaba muy implicada en una causa social, tal vez puedes encontrar una fórmula para seguir su misión a través del voluntariado en equipo.
3. Hablar de esa persona en familia, pero también más allá del entorno familiar
El legado y la huella de una persona se transmite a través de aquellos familiares que actúan como testigos del amor y la vida que ese alguien especial dejó a su paso. Es posible dar homenaje a una persona fallecida a través de situaciones tan cotidianas como compartir anécdotas, recordar hechos relevantes o profundizar en su propia historia.
4. Conservar con cuidado algún recuerdo emocional
Algunos bienes adquieren un significado emocional cuando se enmarcan en este contexto. Por ejemplo, una familia con niños o adolescentes puede conservar con cuidado las cartas, las fotografías o los libros de ese ser querido.
5. Marcar una fecha en su honor y celebrarla de forma especial
Como hemos mencionado, es posible rendir homenaje al recuerdo de una persona fallecida en la rutina cotidiana a través de conversaciones que profundizan en su historia de vida. Pero, si te apetece marcar una fecha fija en el calendario para compartir con tus hijos alguna tradición especial, también puedes hacerlo. Por ejemplo, es posible programar una reunión con la familia extensa en el cumpleaños de ese ser querido. De este modo, ese día se convierte año tras año en un motivo para el encuentro de aquellos que tanto le quisieron (y siguen haciéndolo).
¿Quieres rendir homenaje al recuerdo de un ser querido y quieres hacer partícipes a tu hijos de esa experiencia? El amor es la clave.
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