Receta para Halloween: Fantasmas de merengue
Ya apenas quedan unos días para que llegue la divertida, y no por ello terrorífica, noche de Halloween. A pesar de ser una tradición ajena a nuestro país, es cierto que en pocos años ha acabado encontrando un hueco entre nuestras celebraciones. Y es que nada hay mejor para una buena diversión que combinar la risa y el miedo a partes iguales y si encima lo endulzamos debidamente, entonces ya tenemos la fiesta perfecta.
Además de los ingredientes típicos para este día: la decoración, los disfraces, historias y cuentos que nos hagan estremecer, también podemos usar nuestra imaginación para ofrecer un menú especial. La reina de esta noche es, sin duda, la calabaza que, más allá de servirnos de decoración podemos prepararla de mil formas, así tenemos una rica crema o unas galletas con su oronda carita. Pero hoy vamos a ofreceros una receta que, aunque su protagonista es un fantasma, resulta de lo más dulce ya que su componente principal es el merengue.
Ingredientes: 1 clara de huevo, 60 gramos de azúcar y chocolate para los ojos.
Modo de hacerlo:
- Lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno a unos 140 grados.
- Montamos la clara del huevo a punto de nieve y a medida que vaya subiendo vamos a ir añadiendo el azúcar poco a poco, sin dejar de remover.
- Metemos el merengue en una manga pastelera y vamos a utilizar la boquilla que mejor nos convenga, si queremos hacer fantasmas grandes o más pequeños.
- En la bandeja del horno habremos puesto un papel de hornear y, sobre él, iremos formando los fantasmas con la manga pastelera. Los metemos en el horno a 140 grados durante, aproximadamente, 40 minutos.
- Para evitar que sufran cambios bruscos de temperatura y se nos quiebre, lo mejor es dejarlos reposar en el horno apagado.
- Una vez estén fríos, ya podemos decorarlos. Dos ojos serán suficientes por lo que podemos utilizar lacasitos, pepitas o sirope de chocolate.
Vía | Cocina