Receta para el bebé: Sopa de sémola o tapioca

Receta para el bebé: Sopa de sémola o tapioca

Escrito por: Belén    31 octubre 2009    2 minutos

Cuando comenzamos con la alimentación complementaria para nuestro bebé a todos nos parece que hay poca variedad y que el niño puede dejar de comer por aburrimiento. La tapioca y la sémola son dos alimentos muy nutritivos y adecuados para los bebés de corta edad. Así puedes variar un poco sus comidas. La tapioca es un derivado de la mandioca o la yuca. La sémola es una harina de cereal, para los bebés se usa la de arroz porque no tiene glúten. Ambos alimentos son muy sencillos de preparar. El pediatra te indicará el momento de introducirlos en la dieta, pero generalmente se puede a la vez que los cereales.

La tapioca no contiene gluten, y es un alimento rico en hidratos de carbono. Al cocinarla queda como pequeños granitos transparentes, con consistencia ligeramente gelatinosa. Para el niño es muy agradable y fácil de tomar. La sémola tienes que buscarla de arroz, al menos hasta que el médico te indique que el niño puede comenzar con los alimentos con glúten. Son diminutos trocitos de pasta. En ambos casos es muy dificil que el niño se atragante comiéndolos.

Cuando prepares las papillas del peque, reserva parte del caldo para hacer sopa. Puedes congelarlo en pequeños botes y así tenerlo disponible para cuando lo necesites. Ambos alimentos se preparan echándolos sobre el caldo en forma de lluvia y removiendo. Deja que hiervan durante 5 minutos y ya lo tienes. Ten la precaución de dejar enfriar la sopa lo suficiente para que el niño no se queme. Puedes reservar una parte del caldo sin calentar y mezclarlo cuando ya esté la sopa, para enfriarla antes.

Son sopas perfectas para la cena y como el sabor dependerá del caldo que hayas utilizado, el bebé tendrá un sabor nuevo cada noche y así la variedad que buscas. Los adultos y los niños mayores también pueden tomarlas aunque en el caso de la tapioca su consistencia puede causar rechazo, algo que no suele pasar con los bebés.

Ambos alimentos puedes comprarlos en casi cualquier supermercado, generalmente en los lineales de pasta.

Foto | Directo al paladar

Reportajes


Comentarios cerrados