¿Qué es la transparencia psíquica en el embarazo?
Pasado, presente y futuro son tres expresiones del tiempo que adquieren un especial significado en la existencia de una mujer embarazada. En este momento, incorpora a su presente el futuro potencial de una nueva vida. A su vez, permanece atenta al instante en cada una de las etapas del embarazo. Sin embargo, los propios recuerdos de infancia cobran una nueva actualidad ante la expectativa de la maternidad.
El descubrimiento de la propia maternidad puede conducir a la reflexión en torno a los vínculos mantenidos con el padre o la madre. Y quizá sea en este momento cuando afloren con más nitidez los recuerdos del ayer, conflictos del pasado que no fueron superados o nudos emocionales que permanecen más allá del paso del tiempo.
El surgimiento de una sensibilidad más intensa
Este fenómeno recibe el nombre de transparencia psíquica. Este es un concepto que fue acuñado por la psiquiatra francesa Monique Bydlowski. Esta experiencia emocional está acompañada por una mayor sensibilidad. La persona está más receptiva hacia cuestiones que, antes de este momento, parecían no tener tanta importancia.
De este modo, puede ocurrir que una persona se sienta vulnerable en este momento si los recuerdos del ayer están vinculados con sensaciones que producen emociones y sentimientos como la tristeza, la frustración o la rabia. Es decir, la memoria del ayer cobra una mayor intensidad desde esta perspectiva. Lo inconsciente se hace consciente a través de este proceso vital. De este modo, pueden aflorar tanto los momentos más felices, como aquellos que tienen una naturaleza distinta.
En esta etapa de la vida se producen cambios corporales que son visibles. Pero el cambio va más allá del plano corporal. El mundo interior de la protagonista también sufre una importante transformación. De este modo, puede ocurrir que algunos miedos, emociones y cuestiones del ayer influyan en el diálogo interior de quien protagoniza este momento de esperanza.
El pasado se hace presente en el recuerdo
Desde este punto de vista, la persona no solo dedica tiempo a planificar la llegada del bebé, sino que también se sumerge en su propia biografía. El nacimiento de un bebé implica la formación de un nuevo vínculo. Y en este momento de cambio surge la referencia de la niñez.
De este modo, puede llegar a ocurrir que la protagonista reviva situaciones que creía olvidadas. También puede suceder que perciba con mayor intensidad las emociones desagradables o agradables (todas ellas son positivas). Quizá recuerdes con mayor sensación de realidad algunos de los sueños que te acompañan mientras duermes. Esta enumeración de ideas es la manifestación de esta transparencia psíquica en el embarazo.
Todos estos ingredientes influyen en el estado de ánimo pero, al mismo tiempo, propician el autoconocimiento de quien vive un periodo de transformación interior.
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