¿Qué son las estereotipias y cómo se identifican en los niños?

El movimiento forma parte del desarrollo corporal de un ser humano. Sin embargo, en ocasiones, el movimiento o los gestos corporales no se alinean con una intención perfectamente definida, sino que se repiten con frecuencia de manera involuntaria. Ese tipo de gesto que parece seguir un mismo patrón recibe el nombre de estereotipia. Cuando los padres perciben un movimiento llamativo en su hijo, suelen sentir algún tipo de inquietud al respecto. En ocasiones, la estereotipa se enmarca en el diagnóstico de algún trastorno.

Por ejemplo, las estereotipias están presentes en niños con autismo que experimentan un aleteo en sus manos (u otro tipo de patrones). Es decir, en ese caso, cuando se produce un aleteo de manos, el movimiento estereotipado se enmarca en la parte superior del cuerpo. El propio concepto describe con nitidez la característica principal de un tipo de gesto que es estereotipado, es decir, se repite de la misma forma. Aunque cada acción es individual, es posible observar un patrón que se mantiene a lo largo del tiempo como un esquema fijo.

Hay diferentes tipos de estereotipias, más allá de las complejas

Conviene indicar que, en la mayoría de las ocasiones, las estereotipias que se manifiestan en la infancia y cuyos signos pueden empezar a aparecer en torno a los 3 años, no tienen un gran alcance. De hecho, hay que señalar que existen diferentes tipos de estereotipias, por ello, cada caso debe evaluarse de manera individual. Más allá de aquellas que se consideran complejas, hay otras que se producen con más frecuencia. Por ejemplo, una de las estereotipias que se producen en niños de corta edad es chuparse el dedo.

Cada caso evoluciona de manera diferente a largo plazo

La intensidad con la que se produce un movimiento repetitivo y estereotipado también puede estar en conexión con otras variables que se integran en la vida del niño. Por ejemplo, los gestos tienden a aumentar en momentos de estrés. Es importante analizar cada caso a nivel individual a largo plazo puesto que se producen situaciones diferentes en relación con este tema. En ocasiones, se pueden producir puntos de inflexión en relación con los movimientos llevados a cabo (pasando de un tipo a otro). También puede ocurrir que los síntomas se intensifiquen a largo plazo o, por el contrario, que se produzca el proceso opuesto y lleguen a desaparecer (la probabilidad aumenta en el caso de las estereotipias primarias).

A veces, el niño también se distrae del propio movimiento a través de un estímulo externo. Las estereotipias tienden a percibirse a través del lenguaje corporal. No solo pueden manifestarse por medio de movimientos que se enmarcan en la parte superior del cuerpo, sino también a través de la postura.

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