¿Qué son las dinámicas de presentación para niños?

El comienzo del curso escolar, una actividad extraescolar o un taller educativo representa el camino de un proceso de aprendizaje y, también, de interacción con los demás. En ocasiones, muchos de los alumnos no se conocen cuando se encuentran por primera vez en el aula. El protocolo habitual en un entorno de relación social es que cada uno se presente ante los demás.

Sin embargo, el enfoque de ese momento puede adquirir perspectivas diferentes. Y las dinámicas de presentación hacen que la diversión, el sentido del humor, la simpatía y el entretenimiento formen parte de esa experiencia. Es decir, son ejercicios que añaden espontaneidad y naturalidad al proceso.

Juegos divertidos para aprender los nombres en el primer día de clase

Las dinámicas de presentación fomentan la cooperación y el trabajo en equipo. Es decir, van más allá de la perspectiva del yo. De este modo, el alumno no se limite a decir su nombre y algún aspecto personal ante los demás. Interactúa con los allí presentes en una dinámica que tiene unas indicaciones claras.

Los ejercicios de presentación son recursos de ayuda para propiciar la cercanía emocional y la confianza ante el grupo. El proceso requiere de implicación y participación por parte de todos los miembros de la clase. Por ello, son experiencias que favorecen la vinculación, la comunicación y la escucha. Es decir, propician la formación de nuevos lazos interpersonales.

Ofrecen un esquema claro para comunicar un mensaje sencillo

La timidez, el miedo a hablar en público o la inseguridad que produce la ruptura con la zona de confort pueden irrumpir en el momento en el que alguien se presenta ante un grupo de personas desconocidas. Pues bien, el objetivo principal de los ejercicios de presentación es ofrecer recursos y herramientas de apoyo para afrontar ese momento con confianza. A partir de ese primer contacto, el grupo va a seguir evolucionando. Y cada participante puede experimentar una mayor conexión con algunos compañeros.

El juego se encuentra en la base de una dinámica educativa de estas características. El entretenimiento influye positivamente en la expresión emocional y, también, en el nivel de atención. De este modo, los participantes aprenden los nombres de sus compañeros.

Las dinámicas de presentación se utilizan en todos los niveles educativos. También son habituales en las clases de formación para adultos. Las dinámicas de presentación alimentan el sentimiento de pertenencia en un momento en el que todavía no existe una verdadera cohesión grupal. Crean un clima agradable y cada participante encuentra su propio espacio. La dinámica elegida por el profesor es una fórmula práctica para que cada persona se presente ante los demás y, también, para que conozca a sus compañeros. De este modo, el planteamiento inicial está alineado con un objetivo perfectamente definido en el contexto en el que se desarrolla la actividad.

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