Qué hacer cuando el bebé tiene cólicos

Seguro que todos hemos oído hablar de los cólicos de los lactantes. Pero realmente hasta que no te sucede no sabes lo que es. Muchos padres creen que porque su hijo llore un poquito o le cueste echar los gases tiene cólicos. Pero nada más lejos de la realidad, los cólicos suponen un sufrimiento terrible para el bebé y por ende para sus padres que se ven impotentes ante el dolor, el estremecimiento y los retortijones que padece su pequeño tesoro.

Pero una vez detectados bien los síntomas, es importante que los papás o cuidadores del bebé sepan a qué atenerse a la hora de ayudar al niño. Lo único que realmente se conoce bien de los dichosos cólicos es que desaparecen al tercer mes de vida del niño. Teniendo en cuenta que NO hay nada que los prevenga o los remedie, sí existen una serie de consejos que parece que funcionan. Eso sí, no todos parecen tener éxito en no todos los niños. Aquí os los dejamos:

Qué hacer:

• Facilitar que expulse los gases. Es importante que el bebé después de comer eche los gases que se le hayan acumulado en el estómago. La manera tradicional para ayudarle a eructar suele funcionar: niño en el hombro y darle unos golpecitos suaves en la espalda. Por otro lado si estiras y flexionas sus piernas con suavidad sobre el vientre le ayudas a expulsar pedetes.
• Que no pase hambre. Evitar que se ponga nervioso o tenga ansiedad por hambre.
• Ambiente relajado. Es fundamental que el niño se encuentre en un ambiente tranquilo y relajado en esas horas de la tarde cuando suelen producirse las crisis de los cólicos.
• Por turnos. El llanto incesante del bebé puede sacar de quicio a la persona que esté haciéndose cargo del bebé por lo que resulta de gran ayuda que se vayan turnando. Primero papá, luego mamá, después… en función de la ayuda que tengáis. El niño también nota los nervios de quien le atiende.
• Mimos. Otro aspecto que parece bastante importante es no privar al niño del contacto físico, de los mimos y del cariño. Dejarle sólo en la cuna o en una sillita no le ayudará en absoluto a pasar el mal momento.
• Los masajes en la tripa o en la espalda también les alivian. El calor que se les transmite con esos masajes también parece que les relaja.

Vía | Ser Padres
Foto | tostadophoto.com

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