¿Qué es la adultización de la infancia y cómo se manifiesta?

La infancia es uno de los periodos más importantes de la vida. Un capítulo de la biografía que debe vivirse sin acelerar el propio proceso de crecimiento. Sin embargo, en la sociedad actual existe una paradoja evidente: la adultización de los niños pone de manifiesto la asimilación de comportamientos que corresponden a otras etapas de la vida.

El juego, la creatividad, el entretenimiento y la diversión son ingredientes que forman parte de una infancia feliz. Ingredientes que quedan en un segundo plano cuando se manifiestan síntomas de adultización en un menor que, por ejemplo, convive con una agenda interminable de ocupaciones.

Qué ocurre cuando los niños parecen, en realidad, adultos

El adulto puede convertirse en un referente positivo para el niño, por ello, padres y madres son conscientes de la importancia que tiene educar a sus hijos a través de su propio ejemplo diario. El menor observa en el ejemplo de sus progenitores una referencia de admiración. ¿Pero qué ocurre cuando un niño de corta edad parece en realidad un adulto? En ese caso, es víctima de la influencia de la adultización.

La adultización puede manifestarse en el ámbito de la moda, en el uso de las tecnologías o en el acceso a cualquier tipo de información. Existen algunas preguntas que, aunque se realicen con buena intención, son un reflejo de esta tendencia. “¿Tienes novio?” es una pregunta que, aunque se realice en un tono divertido, es la expresión de este hecho. Si un padre o una madre tratan a su hijo como si fuese mayor de lo que es en realidad, percibe en él un nivel de madurez que no posee realmente.

Es decir, todavía no está preparado para tomar algunas decisiones porque necesita más tiempo para desarrollar habilidades y competencias. Todo ser humano debe vivir el presente para ser plenamente feliz, sin embargo, la tendencia de la adultización es un reflejo de cómo el ahora puede verse interrumpido por la influencia del futuro. Esta tendencia acelera las etapas del propio crecimiento como consecuencia de las expectativas equivocadas que los adultos depositan en el menor.

Existen otros errores que son un reflejo de esta tendencia. Reemplazar la responsabilidad de educar desde el rol de padre o madre por el papel de colega es un error posible. También puede ocurrir que la felicidad infantil esté condicionada de forma negativa por preocupaciones que no le corresponden al niño o por el estrés.

Cómo evitar la adultización de la infancia

El estilo de vida adulto está condicionado de forma negativa por la prisa y la búsqueda de la inmediatez. Un estilo de vida acelerado que, a su vez, está acompañado por el perfeccionismo y la búsqueda de resultados. Sin embargo, la infancia es un universo del tiempo que debe protegerse especialmente. El niño necesita vivir las experiencias propias de esta edad en el tiempo en el que se encuentra. En caso contrario, llegará a la adolescencia con vivencias pendientes en el camino.

A lo largo de los años existen muchas cosas que cambian en la sociedad, como es posible observar desde la distancia intergeneracional. Pero algunas necesidades básicas están alineadas con la naturaleza humana y, por tanto, son permanentes: jugar y ser niño.

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