¿Qué es un concierto didáctico para niños?
Los conciertos de música forman parte de la agenda cultural que se programa a lo largo del año en ciudades y pueblos. Es un evento que, por sí mismo, ofrece una oportunidad para el aprendizaje (aunque ese no sea el fin principal del acto). Existe un tipo de concierto en el que la formación es inherente a la planificación de la actividad: una experiencia didáctica es aquella que se alinea con un objetivo específico.
Por ejemplo, explicar a los alumnos cuáles son las diferentes familias de instrumentos musicales, profundizar en el legado artístico de un músico, la interpretación de la banda sonora de diferentes películas o hacer un viaje a través de la historia por medio de la presentación de diferentes ritmos. Los conciertos didácticos ponen el acento en explicar las características de diversos estilos y en las curiosidades del lenguaje musical. La interacción con el público es constante.
Una experiencia musical que aporta una formación integral
Por tanto, existen diferentes recursos y herramientas para que los niños descubran el universo musical. Un concierto de este tipo es uno de los medios que une a educadores, profesionales y alumnos. Es una propuesta cultural que también se dirige a las familias durante el tiempo de ocio. Como en cualquier tipo de concierto, el entretenimiento, el cultivo de la sensibilidad y la percepción de la belleza auditiva a través del oído está presente durante todo el proceso. Aunque la música es el ingrediente principal de la programación, el proyecto se compone de otros elementos como la narración. De este modo, el espectador obtiene información sobre un tema por medio de un lenguaje sencillo y una experiencia práctica.
El proyecto ha sido perfectamente planificado para lograr su misión esencial: cumplir los objetivos educativos previstos en el contexto de la programación. Las metas formativas aportan sentido al proceso creativo y se integran en el plan de acción desde la etapa inicial. De este modo, una óptima planificación es determinante en un concierto pedagógico que presenta una propuesta adaptada a las necesidades y expectativas del público al que se dirige. Es una herramienta educativa que no solo se integra en la formación musical infantil. Algunos conciertos se dirigen al público adolescente.
Es un evento participativo y emotivo
El público es espectador y protagonista. Experimenta vivencias que están acompañadas por la banda sonora del acto, pero también por emociones que alimentan el interés y el descubrimiento. La curiosidad, el asombro, la ilusión, la alegría y la motivación, además de otras sensaciones y sentimientos, fluyen durante el proceso. El tema del evento, la duración del mismo, el lugar elegido para celebrarlo, la fecha o el número de asistentes son factores que se concretan atendiendo a criterios educativos. Un verdadero aprendizaje está acompañado por la comprensión del objeto de estudio. Es decir, el concierto didáctico aclara dudas, responde preguntas y ofrece información contrastada.
La interacción con la música en directo es clave en los conciertos didácticos. Es una experiencia educativa que se completa con un adecuado seguimiento posterior.
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