Los principales beneficios de permanecer en el mismo colegio
Muchos alumnos pasan toda la vida en el mismo colegio porque así lo hicieron sus padres, pero lo cierto es que detrás de esto hay una explicación que tiene más que ver con haber percibido un apoyo por parte de los profesores. La etapa escolar de los alumnos, más allá de conseguir una buena calificación académica que les proporcione una buena base; es un apoyo fundamental en su desarrollo como persona, y para ellos es muy importante que se les fomente desde el profesorado una competitividad que sea sana, y con un profesorado que se alegre de los logros de unos y de otros por igual.
Una excelencia académica y una buena formación en valores son las claves en un Colegio Internacional Marbella en el que sus alumnos conceden parte del mérito de sus buenos resultados al soporte que han recibido por parte del centro y en concreto de sus profesores, año tras año. La metodología de un colegio internacional es una ventaja al permitir continuar la formación tras el colegio en cualquier universidad del mundo, impregnándose de una cultura y conocimiento que les van a proporcionar mayores habilidades.
Ayudar a crecer como persona
El profesorado tiene una gran calidad humana en el Laude San Pedro International College, un centro que pertenece a ISP Schools, una red de 11 colegios privados en España, especialistas en educación británica e internacional; y ese mismo profesorado se mantiene al lado de los alumnos en sus diferentes etapas, enseñándoles a esforzarse tanto en la parte académica como en la personal. Esto crea en los alumnos una fuerte vinculación con el centro que les hace querer permanecer hasta los 18 años, y que incluso supone algunas lágrimas cuando llega esa edad y tienen que abandonarlo. Toda esa estabilidad se traduce en mejores resultados en su futuro académico.
Un entorno seguro, feliz e idóneo para el aprendizaje
Cuando la formación se desarrolla en el mismo centro académico desde los 3 hasta los 18 años hay un aporte extra de estabilidad que ayuda a los alumnos a sentirse felices, y a crecer en valores y como persona.
Lo importante en centros escolares en los que se acompaña al niño desde los primeros pasos, es que la educación es muy personalizada porque los profesores les conocen y les cuidan, evitando que sean un número más en la matriculación.
Además de ofrecer el currículo británico de los 3 a los 18 años, este centro en concreto ofrece también la opción de estudiar la ESO y Bachillerato con hasta el 65% de las clases en inglés. El objetivo es enriquecer el currículo ofreciendo un bilingüismo en inglés y español desde las primeras etapas, además de un tercer idioma.
Atención por el proceso individual de cada alumno
En las tutorías se atiende de manera personalizada tanto a cada alumno como a su familia, y el vínculo va creciendo a lo largo de las diferentes etapas. Cuando la relación es así, se crea el ambiente adecuado para poder estimular el pensamiento crítico e independiente, así como a plantearse cuestiones y tener curiosidad por indagar y aprender.
En definitiva, en centros así donde se imparte la formación desde los 3 hasta los 18 años, las relaciones tanto con los compañeros como con los docentes son más duraderas, en una edad que es clave para su desarrollo psicosocial.
Los niños que estudian toda su etapa en un mismo centro escolar suelen tener mejores resultados académicos y personales. Cambiar de centro implica para un niño empezar desde cero y su rol en ese entorno ya no será el mismo.
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