Un portaaviones italiano funciona como hospital para bebés y niños en Haití
Cavour, el inmenso portaaviones italiano, tiene a bordo a una mujer y su bebé de tres meses, con una herida en la pierna; su llanto se escucha en las noches, cuando la bebé se despierta hambrienta. “Una situación extraña para un buque militar” según las declaraciones del Capitán Gianluigi Reversi, encargado de la nave.
El portaaviones transportó alrededor de 800 militares, seis helicópteros y un equipo de asistencia médica, compuesto por cinco doctores, especialistas en cirugía, cardiología, anestesia, ortodoncia y psicología, acompañados por 30 paramédicos, preparados para atender a los heridos de gravedad, quemados y afectados emocionalmente por la devastación del terremoto, en especial los niños.
Esta es la primera misión internacional del buque, construido en el 2004 y considerado uno de los más poderosos del mundo; llegó a Puerto Príncipe el 31 de enero, después de 10 días de viaje y de una escala en Brasil, donde recibió a las tropas brasileñas designadas, para transportarlas hasta la isla.
Desde su llegada, el equipo médico del Cavour estableció un hospital en tierra firme, servicios de exámenes de laboratorio, escáneres y sala de cirugía a bordo, donde esperan recibir a otros 50 niños que requieren operaciones, la próxima semana, ya que el buque cuenta con instalaciones de última tecnología para realizar las intervenciones.
Estos 50 niños serán operados como parte de la “Operación Sonrisa”, establecida en Haití para ayudar a los pequeños que padecen, en este caso, deformidades faciales; las operaciones se realizarán en el transcurso de dos semanas, utilizando la cámara hiperbárica de la nave, que mantendrá a los pequeños resguardados del polvo y la suciedad de tierra firme, durante la intervención.
Vía | Reuters
Foto | Foro Militar
Comentarios cerrados