Los padres tienen derecho a elegir centro escolar

Según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), los padres tienen derecho a elegir el centro donde estudian sus hijos. Así lo ha afirmado en una sentencia a favor de los padres de dos estudiantes que se habían quedado sin plaza en el centro escogido. En concreto el fallo obliga a matricular de manera definitiva a los niños en el citado centro, alegando la ampliación de la ratio y que el derecho a la elección del centro es de los padres.

La historia es una de tantas que se repite cada año. Dos familias no pueden acceder al colegio elegido, en este caso el Compañía de María en Jerez de la Frontera, y descubren que hay doce alumnos que si lo han hecho sin cumplir los requisitos o falsificando datos. Incluso uno de los demandantes había cursado los tres cursos de Educación Infantil y quedó fuera al llegar a Primaria. La Consejería de Educación estimó el recurso y redujo los puntos a dos de las familias, pero los alumnos siguieron en el colegio. Todo esto sucedió en 2006.

Todos los años sucede lo mismo, sospechas o confirmaciones de fraude, falsificaciones de la situación familiar, de salud o domicilio, y enchufes varios. Cualquier padre haría cualquier cosa porque su hijo entre en el colegio elegido, pero nunca debería hacerse a costa de otro niño. A los nervios de si entrará legalmente, hay que añadir el sufrimiento por cuanta gente logrará estafar al sistema. Al menos hay jurisprundencia a la que agarrarse, aunque haya que esperar 6 años para tener un fallo.

Lo que dice la sentencia del TSJA es muy interesante pero no la realidad. Los padres que quieren una educación religiosa para sus hijos ven como el colegio se llena de gente que no comparte esas creencias. Los que viven cerca de una gran empresa tienen que «luchar» contra todos los empleados que tienen el mismo derecho a elegir centro en ese lugar. Si uno de los dos no trabaja, pierden opciones por lugar de trabajo. Los matrimonios están en desventaja frente a las parejas que no lo están, etc. A todo eso sumamos a los estafadores.

Si el nivel educativo mínimo fuera suficientemente alto, si las instalaciones de todos los colegios fueran las óptimas, no habría tantos problemas. Pero la realidad es que los niños salen mejor o peor preparados según el centro escolar y hay pequeños que estudian en barracones. Animo a los que estaís en este proceso.

Vía | El Mundo
Foto | Flickr-Medea_material

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