Padre no hay más que uno 3: cinco reflexiones sobre la película

Las películas familiares propician el encuentro de los seres queridos en torno a la gran pantalla. Y Padre no hay más que uno 3 cumple con ese objetivo. En un periodo en el que algunas películas reciben a un público poco numeroso, el reciente estreno al que hacemos referencia en el post afianza el éxito de la saga. En El Blog Infantil compartimos cinco reflexiones sobre la película protagonizada por un amplio equipo en el que destaca la presencia de Loles León, Santiago Segura, Toni Acosta, Carlos Iglesias y Silvia Abril.

1. Ventajas de celebrar la Navidad en verano

La película está ambientada en el periodo navideño. El argumento comienza a desarrollarse en las semanas previas a la celebración de las fiestas de fin de año. El espectador se sumerge en un tiempo muy emocional en un contexto distinto como el verano. Por tanto, aquellos que disfrutan de la magia de esas fechas pueden revivir su esencia en la gran pantalla.

Sin embargo, la Navidad también representa la nostalgia, el síndrome de la silla vacía o la soledad que irrumpe en la vida de otras personas. En ese caso, la visualización de esta película navideña durante el mes de agosto, sí marca una distancia emocional en relación con algunas de las sensaciones descritas. Es decir, el espectador puede disfrutar de la historia sin sumergirse de lleno en el universo sentimental de la Navidad.

2. Una película con una trama intergeneracional

Como hemos comentado, es una historia que conquista al público familiar. Abuelos, padres y niños pueden acudir al cine para disfrutar de la historia. El componente intergeneracional está presente en la propia trama ya que los diferentes roles familiares tienen su espacio en el argumento.

3. Un argumento sencillo que ofrece lo que el espectador espera

La familia, el humor, la vida cotidiana, la amistad, las tradiciones y los valores forman parte de una trama que, como es previsible, culmina con un final feliz. Un desenlace que forma y educa con lecciones que giran en torno a la generosidad y el bien común. Es probable que la película no esté a la altura de las expectativas de aquellos que la visualizan como enormemente divertida. Pero sí dibuja una sonrisa en el rostro de los espectadores.

4. Los niños adquieren un gran protagonismo

Como hemos comentado, es una película que tiene un componente intergeneracional. Sin embargo, los hijos de la familia protagonista adquieren una gran visibilidad en la historia a partir de un hilo conductor de temática navideña que da lugar a diferentes situaciones.

5. Los propios espectadores potencian el marketing de la película

Padre no hay más que uno 3 atrae a un público numeroso. La propia recomendación de aquellos espectadores que ya han visto la historia se convierte en una motivación para que otros planifiquen el mismo plan de ocio.

Por tanto, Padre no hay más que uno 3 es una de las películas que, actualmente, reúne a las familias en la gran pantalla. Una experiencia que ofrece la oportunidad de redescubrir la magia de disfrutar de una historia en las salas de cine. Es una cinta recomendada para mayores de 7 años. A continuación, puedes ver el tráiler de la historia.

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