Los ojos de los bebés absorben más radiación dañina que los adultos

La pupila de los bebés es más grande y su cristalino más claro, esta es una de las causas por las que los niños absorben más radiación dañina que los adultos. En total 6 veces más que el ojo del mayor. Otra de las causas es que pasan más tiempo al aire libre, lo que les hace que ese riesgo aumente por tres a la hora de retener la radiación UV, esa que puede causar distintas lesiones en la vista.

Este informe ha sido dado por el Instituto Varilux que ha alertado de la necesidad de proteger los ojos del niño durante todo el año, a través de una lente que garantice la total protección. Del mismo modo que protegemos su piel con productos que eviten el daño solar, también es necesario proteger sus ojos del impacto del sol, y no solo en verano.

Precisamente es en invierno cuando más impacto negativo pueden recibir los ojos del bebé, sobre todo si pasamos tiempo al aire libre, en zona de montaña o practicamos deportes de nieve como el esquí. El sol al reflejarse en una superficie plana, como puede ser la nieve, sus rayos no son absorbidos por la tierra lo que hace es despedirlos a modo de espejo, llegando a traer serios problemas en la vista. De ahí a que una de las prendas imprescindibles en estos casos, especialmente para el frágil ojo del bebé, sean las gafas protectoras para los rayos solares.

Es por esto que se ha desarrollado una lente especial para los pequeños con una protección solar mucho más elevada, al mismo tiempo que con muchas más resistencia. Consiguiendo unas gafas adecuadas para los niños que han de ser más resistentes, ligeras y cómodas.

Vía | Telecinco
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