Nutrición infantil: Alimentos ricos en zinc
Ofrecer a nuestros niños una alimentación variada es fundamental para su perfecto desarrollo. Es importante que nos aseguremos de que reciben todos los nutrientes necesarios, muchos de ellos en forma de minerales. El hierro, el calcio o el flúor, son algunos de ellos, sin embargo todavía son muchos más los que componen esta tabla de perfecta nutrición.
Hoy nos vamos a detener en el zinc, un micromineral que participa, de forma activa, en las células, por lo que está implicado en todos los sistemas de mantenimiento y regulación de nuestro organismo.
Participa en el metabolismo y el ADN
Como ya hemos visto, el zinc participa en un gran número de reacciones químicas que están relacionadas con la salud de nuestras células y, también, con la de nuestro sistema inmune. Pero sus beneficios van mucho más allá. El zinc interviene en muchos procesos metabólicos, especialmente en la fabricación del ADN o material genético. También aporta grandes beneficios en la fertilidad, ya que activa la producción de ciertas hormonas.
Otros beneficios están relacionados con nuestro aspecto físico, especialmente en la piel, las uñas y el cabello. Un déficit de este mineral puede provocar eczéma, psoriasis, acné; la caída del cabello o la proliferación de canas de forma prematura. Las uñas se vuelven frágiles y con manchitas blancas.
Pero el zinc es fundamental para el desarrollo humano, por eso es necesario que nuestros niños reciban un buen aporte de este mineral ya que contribuye a la formación de los huesos y de sus órganos reproductores.
Alimentos ricos en Zinc
Puesto que este mineral no se encuentra en nuestro organismo, es necesario que lo tomemos de la alimentación en cantidades equilibradas. Son muchos, y muy variados, los alimentos que contienen zinc, así que no nos será difícil que nuestros peques tengan una buena reserva de este mineral en su organismo.
El tipo de alimentos que más zinc contienen son los moluscos, y muy en especial, las ostras. También lo encontramos en la carne, especialmente la de cordero, en pescados y en los huevos. También los lácteos aportan una cantidad de este mineral. Así como el sésamo, los piñones, la soja y los frutos secos, sobre todo en las nueces, avellanas y almendras.
El germen de trigo y la levadura de cerveza suelen ir estupendamente en aquellos casos en los que nuestro organismo anda necesitado de zinc, tomándolo como un aporte extra a la alimentación.
Vía | Webconsultas
Fotos | Gastropekes y Calorías y nutrientes
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