Nuevas ideas para salvar a las madres y recién nacidos en el parto
Ya supimos, hace años, como los gobiernos de los países integrantes de la ONU habían decidido plantearse un objetivo bien claro, para poder solucionar durante estos primeros años del milenio. Uno de ellos era evitar el importante número de muertes de madres y recién nacidos durante el parto o en las siguientes horas. Esto podría ser evitable, en la mayoría de los casos, en 90 por ciento si se dotarán de medios, tanto técnicos como humanos, en esos rincones donde se encuentran totalmente desprovistos de las mínimas necesidades.
Pero aunque parece que se está haciendo un esfuerzo, todavía es tan mínimo que se necesitan de muchos más. Así es como se han reunido en Whasington un consorcio internacional de gobiernos y fundaciones que han expuesto claramente unas ideas con las que acabar con esta enorme lacra que, solo en un año, se lleva a más de 150 mil madres y más de un millón y medio de bebés.
Este congreso, reunido bajo el nombre de «Salvando vidas en el parto», premió distintas ideas que, además de ser totalmente viables, no requieren de más esfuerzo que la propia voluntad de los gobiernos para que se produzca el «milagro».
La Universidad de Toronto sugiere que los tés sean enriquecidos con hierro. Esta bebida está muy extendida en todo el mundo, especialmente en zonas donde se producen estos hechos. Otra de las ideas nos viene desde la Universidad de Valencia que está luchando contra la sepsis, enfermedad infecciosa, muy extendida en África y que cada año aboca a la muerte a un gran número de madres y niños. La propuesta de los valencianos, es repartir una serie de tiras radioactivas que pueden medir la cantidad de proteínas histonas en sangre y saber si están infectados.
Pero no debemos olvidar que en estos rincones del mundo existen muchos impedimentos sociales, culturales y religiosos que bloquean la asistencia al médico de estas mujeres, así que el proyecto presentado por el doctor guatemalteco Edgar Kestler consiste en llevar información y formación a aquellos núcleos rurales donde todavía se tiene una cierta adversión al centro sanitario, fomentando que acudan a los médicos especializados y abandonar la idea del parto solitario en casa como viene siendo tradicional.
Vía | Diario de Navarra
Foto | Bebé bilingüe