Los niños en el cine: Harvey Stephens
Que los niños participen en el cine es algo muy habitual. Los pequeños suelen dar un toque de alegría e inocencia a historias divertidas, románticas o llenas de encanto. Pero también es cierto que si los niños, con su eterna candidez, participan en películas de terror, entonces el miedo se vuelve doble, apenas si somos capaces de concebir que un ser tan inocente albergue tanto mal en su interior.
Este es el caso de distintos jóvenes actores que supieron bordar su papel como verdaderos seres malignos. Es el caso de Linda Blair, por ejemplo, que consiguió hacernos pasar verdadero pánico con su intervención en «El Exorcista». Y siguiendo esta línea nos encontramos con Harvey Stephens, el niño que nos presentó al anticrito en «La Profecía».
Harvey Stephens nació en Londres en 1970, con sólo 6 años entró por la puerta grande del cine por su papel de espíritu malvado en «La Profecía», película dirigida por Richard Donner y que contaba con un reparto de lujo, entre ellos el veterano Gregory Peck. En esta película interpretaba a Damien Thorn, un niño que es adoptado por una familia con un importante capital. Pero esta angelical criatura, en apariencia, no parece ser tan bondadosa. Por este trabajo fue nominado al Globo de Oro como mejor actor debutante.
Salvo alguna pequeña interpretación en otras películas, de menor categoría, se centró en sus estudios y desde 2002 trabaja en la Bolsa de Londres, está casado y es padre de un hijo.
Vía | Wikipedia
Foto | Revista pantalla