Niño sin identificar al nacer, niño que no existe

Desde que los niños nacen tienen el derecho a forjarse una identidad, es por ello que una vez vienen al mundo, los adultos estamos obligados a inscribirlos en los registros públicos para, de esta forma, tener un nombre y una nacionalidad, además de unos derechos para ser protegidos por el estado, la sociedad y la familia.

Así lo dice el artículo 7 de la Derechos del Niño, pero, tristemente, esta norma básica no es respetada, todavía, en muchos lugares del mundo. Según la ONG Plan, más de 50 millones de niños en todo el mundo no son registrados al nacer, dejándolos en total desamparo ante la sociedad, ya que al no estar inscritos es como si no existieran.

Esta situación de invisibilidad les vuelve vulnerables ante las enfermedades, conflictos bélicos o situaciones de hambre y abandono. No podemos olvidar que, al no estar registrados, no tienen acceso a la educación, ni a la sanidad, ni a cualquier servicio básico necesario para el desarrollo humano. Niños transparentes que merodean por el mundo sin nadie que les ampare y ante la indiferencia del resto.

Para solucionar y alertar de esta situación, Plan ha puesto en marcha una campaña titulada «Registro Universal de Nacimiento» cuyo objetivo es asegurar que todos los niños sean registrados al nacer, vivan en el país que vivan. Y es que, en la mayoría de países del tercer mundo, los costes para registrar a los niños es tan elevado que muchas familias no se lo pueden permitir.

Todavía queda mucho por trabajar y concienciar, pero como cualquier paso ya supone un gran éxito, esta campaña ya ha conseguido que en un país como Camboya, donde los bebés registrados eran sólo un 2 por ciento, se ha llegado al 92 por ciento. También en Paraguay se ha conseguido registrar a 35 mil pequeños.

Vía | Cope
Foto | Cuba debate

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