Neumonía, cada minuto dos niños mueren en el mundo
La Ong Save the Children ha puesto sobre el tapete uno de los grandes problemas sanitarios infantiles que, por desgracia, se siguen viviendo en el mundo. Según las cifras que manejan: dos niños mueren cada minuto debido a una neumonía. Lo más grave de ello es que se trata de una enfermedad que, fácilmente, se puede curar con unos antibióticos de bajo coste.
Esta organización no gubernamental, ha realizado un informe titulado «Luchando por respirar» para, de este modo, denunciar el estado lamentable de desamparo en el que se encuentran algunas comunidades de nuestro planeta en el tema sanitario. Y a partir del mismo, iniciar una campaña con el que solventar este gravísimo problema.
Los fallecimientos son más numerosos en los menores de 2 años
Ya hace algunos años que se viene denunciando esta situación y ofreciendo pautas para solucionarla. De hecho se consiguió crear un plan de acción entre Unicef y la OMS en el que llevar esas soluciones en aquellos lugares con más vulnerabilidad a la enfermedad. Sin embargo todo parece haberse quedado en promesas barridas por el viento de la indiferencia.
Según los datos que arroja este informe, la neumonía es la enfermedad con mayor número de fallecimientos del mundo, siendo especialmente virulenta en menores de 5 años, y mucho más devastadora que la malaria o la diarrea. De hecho, más del ochenta por ciento de los fallecidos son menores de 2 años.
Un medicamento de muy bajo coste es la solución
Pero, al mismo tiempo que lanza la denuncia, también ponen las soluciones. Según esta organización una dosis de Amoxicilina, un antibiótico generalizado en el sistema sanitario y cuyo coste estaría sobre los 30 céntimos de euro, es suficiente para salvar la vida de un niño. Sin embargo, estos medicamentos no están disponibles en aquellos centros sanitarios de países como Tanzania o República Democrática del Congo, lugares en los que la enfermedad se ceba de forma especial.
Por eso Save the Children quiere concienciar a los gobiernos, y a sus responsables, para conseguir erradicar este grave problema de salud. Según sus esperanzas, en poco tiempo se podrán inmunizar a 166 millones de niños menores de dos años y ayudar a otros 400 millones que no disponen de asistencia médica.
Ojalá se cumpla, y no tengamos que hablar de este tema nunca más.
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