Navidad: 8 razones para implicar a los niños en los preparativos

La celebración de la Navidad se vive desde distintas perspectivas en muchos hogares. Aquellas familias que encuentran un sentido positivo en este tiempo pueden integrar a los niños en los preparativos de las fiestas. En El Blog Infantil te damos ocho razones para hacerlo.

1. Hacerle partícipe de los valores de la Navidad

El aprendizaje de los valores tiene una dimensión práctica y vivencial. La colaboración, por ejemplo, se entiende mejor a partir de la participación en procesos que se alinean con objetivos comunes. Y el niño puede formar parte del plan de acción por medio de acciones que se adaptan a su edad y posición.

2. Disfrutar de la magia del proceso

Los preparativos de la Navidad también dan lugar a experiencias únicas como, por ejemplo, la inauguración de la decoración en el salón de casa o la redacción de las felicitaciones familiares. El nivel de felicidad y la conexión con el presente aumentan cuando surge una auténtica participación en el paso a paso.

3. Búsqueda del bien común

A veces, parece que la Navidad es únicamente el tiempo de los niños. Evidentemente, viven experiencias irrepetibles en esta etapa. Pero el verdadero bienestar familiar se sustenta sobre los cimientos del bien común. La implicación de distintas personas en los preparativos de las fiestas es clave para evitar la sobrecarga que muchos padres tienen en este periodo del año.

4. Reforzar la esencia del encuentro intergeneracional

La Navidad, como hemos comentado, implica a distintas generaciones que experimentan el valor del encuentro (más allá de las fechas clave del calendario). De hecho, la implicación de los niños en los preparativos también puede propiciar y potenciar la comunicación entre padres e hijos (y abuelos).

5. Educar a los niños durante las fiestas

La constancia es uno de los valores esenciales en la educación de los niños. Y durante los preparativos de las fiestas es posible poner en perspectiva lo esencial de la Navidad: la compañía, el cariño, el presente y el agradecimiento más allá de cualquier expresión de materialismo.

6. Descubrir la Navidad desde una experiencia holística

Cada año, la Navidad puede redescubrirse a través de una perspectiva familiar, afectiva, emocional, cultural, solidaria… Hay muchas experiencias distintas que los niños viven con frecuencia en fin de año como, por ejemplo, los viajes, la asistencia a eventos musicales, los planes caseros…

7. Desarrollo de la autonomía y la responsabilidad

¿Cómo evitar la sobreprotección en la organización de las fiestas de Navidad en familias con hijos? Si facilitas la participación y la implicación de tu hijo en los preparativos, también le permites cultivar su autonomía y su responsabilidad a través de iniciativas concretas que, por otra parte, se enmarcan en un tiempo de ilusión y motivación.

8. Un entretenimiento positivo

La Navidad suele ofrecer muchos alicientes y planes de ocio a familias con niños. Sin embargo, los preparativos de las fiestas aportan un entretenimiento positivo por medio de objetivos que se afrontan desde la colaboración, la superación personal y la ilusión que producen las expectativas a corto plazo.

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