Nada como Mozart

Nada como Mozart

Escrito por: Alicia Medina    4 enero 2009    1 minuto

Como ya la espera se nos hace tan larga, qué mejor que escuchar música para hacer los días más cortos. Y no sólo la escucho yo, también mi bebé. Me coloco unos cascos en la tripa y he incluido en mi mp3 música clásica, ya que dicen que es una forma de estimulación.

Desde el cuarto mes y medio, el feto ya puede oír el mundo exterior, así que además de que me escuche a mí (lo hará de forma diferente al resto de personas, teniendo en cuenta que está en mi interior y la sonoridad es distinta), también es el mejor momento para empezar a que escuche música.

Dicen los estudios, que la música clásica, debido a su rítmica es muy aconsejable para la estimulación del feto. Además, según parece, cuando el bebé ya tenga unos mesecillos será capaz de recordarla.

Asimismo, la música clásica tiene un efecto calmante en el feto, mientras que si la música es más estridente, rápida o fuerte, el bebé se alterará. Así que he dejado a un lado AC/DC y los Rolling Stones y me he decantado por Mozart. Todos los días pongo un poco el mp3 para que el niño escuche las melodías.

No sé si luego será capaz de reconocer el sonido de Mozart, pero ya os lo contaré más adelante, por ahora, al menos, a mí me sirve para estar más en contacto con mi futuro bebé y para que el tiempo pase más deprisa antes del parto.

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