Las mujeres que optan por la lactancia artificial siguen sintiendo la necesidad de justificarse

Mi experiencia como madre me ha llevado a relacionarme con muchas mamás y he tenido ocasión de debatir y compartir experiencias sobre la lactancia. Todas comparten la creencia de que la elección sobre lactancia natural/artificial deber ser algo personal, aunque cada una de ellas vea con mejores ojos una de las dos. Todas sabemos que la lactancia natural es la más recomendable en los primeros años pero somos comprensivas y tolerantes con la lactancia artificial.

Entonces, ¿por qué las mamás que eligen esta alimentación sienten necesidad de justificarse?, ¿les hacemos sentirse mamás de segunda sin quererlo?. Creo que sí, aunque lo cierto es que están dando a sus hijos todo lo necesario para su desarrollo con las fórmulas artificiales, no están haciendo nada perjudicial para el bebé ya que va a crecer igual con una leche u otra. Sin embargo es frecuente escuchar las típicas frases «es que se quedaba con hambre», «mi leche no le alimentaba lo suficiente porque no engorda», «he tenido que volver al trabajo»…etc.

Creo que ejercemos demasiada presión sobre ellas, presión que en muchos casos produce los efectos contrarios haciendo que dejen la lactancia por considerarla demasiada responsabilidad. Una madre debería ser respetada en esta decisión tan personal. Con toda la información y los consejos sobre lactancia materna en su poder, si una mujer decide no amamantar debería ser suficiente para respetarla.

¿Por qué no pueden decir tranquilamente que no quieren dar el pecho? No por esto quieren menos a sus hijos y sin embargo (según veo diariamente) sigue siendo una decisión políticamente incorrecta ante el resto de la sociedad. Por supuesto, esta es una humilde opinión de una mera mamá que ha amamantado a sus dos hijos y que cree que es una experiencia maravillosa siempre que se haya decidido llevar a cabo libremente, con convicción y sin presiones.

Foto | Flickr-Julien Haler

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