Mi hijo no quiere leer
Es muy normal que veamos que a nuestros hijos no les gusta demasiado acercarse a la lectura. Algunos cuentan con especial dificultad de conectarse con las letras y con los sonidos que le corresponden cuando empiezan a leer, esta dificultad podrá desmotivarlos fácilmente si no trabajamos, junto con su docente, al respecto.
Otros demoran un tiempo en descubrir que las historias escritas pueden ser imaginadas, y esto a mediano plazo les provocará placer. Pero en todos los casos encontrar los sonidos y las palabras será una base para el aprendizaje que tendrán a lo largo de toda su vida.
Existen diferentes maneras para ayudar s los niños a convertirse en buenos lectores. Es bueno empezar con libros cortos, de comics, libros de broma. Lo primero que debemos hacer no es cultivar su alfabetización sino motivarlos a leer.
Sus primeros libros no necesariamente deben ser ricos en contenidos, ni información, estos libros tienen que ser vistosos y coloridos, sus letras de un tamaño grande y las imágenes deberán tener cierta secuencia que harán más llevaderas las historias.
Mediante los libros visualmente llamativos, los pequeños podrán desarrollar su vocabulario. Se empezara a sentir cómodo al experimentar con la lectura y se iran animando a elegir otros libros.
Los niños, normalmente, leen y releen el mismo libro una y otra vez. Y esto está perfecto. Por medio de la repetición podrán dominar el texto y leerlos con confianza y facilidad.
Al principio leerán en voz alta. Así también los podremos ayudar a construir su lenguaje. Una buena alternativa es leer junto con tus hijos y luego charlar acerca de lo leído. Muchos padres luego de compartir un libro aprovechan para dibujar sobre el tema, con lo que la imaginación y la creatividad serán aun mayores.
Vía | Kids Health
Foto | Flickr – Malglam