Mayor riesgo de nacimiento prematuro si comes mal durante el embarazo
Que nuestros bebés se adelanten a la hora de nacer es uno de los grandes misterios que siguen rondando el mundo del embarazo. Es cierto que gracias a las investigaciones médicas y científicas de los últimos años, hemos podido ir delimitando aquellas aptitudes, gestos cotidianos o malos hábitos que pueden conseguir que nuestro pequeño tenga prisa por salir de nuestro vientre, aun con el riesgo de padecer ciertos problemas de salud. El consumo de tabaco, enfermedades infecciosas o problemas genéticos pueden ser algunas de esas claves que provoquen un nacimiento antes de tiempo.
Por eso en su afán de descubrir nuevas vías con las que prevenir este tipo de acontecimientos inesperados, la ciencia médica sigue ahondando para descubrir más causas que, de alguna forma, podemos controlar. Una de ellas es la alimentación. Y sobre ella, durante el embarazo, ha girado un nuevo estudio publicado en el «British Medical Journal», en el que queda patente la importancia que tiene la buena alimentación durante el embarazo y su relación con los partos prematuros.
Aquellas mujeres que toman una dieta equilibrada durante la gestación en la que abundan las frutas, las verduras, los pescados, los granos enteros y beben mucha agua, tienen mucho menos riesgo de sufrir un parto prematuro. Así lo han comprobado un grupo de científicos de Noruega, Suecia e Islandia que han analizado los nacimientos prematuros de 66 mil bebés entre 2002 y 2008.
Con el fin de determinar con más exactitud cuales podrían ser las causas, se descartaron del estudio aquellas mujeres que padecían diabetes y debían completar un cuestionario en el que apuntaban sus hábitos alimenticios durante los primeros meses de gestación. Se tuvieron en cuenta otros factores como la edad de la madre o si ya había tenido otros partos prematuros.
Después de analizar el tipo de alimentación de cada una de ellas, se descubrió que las que se alimentaban con un patrón de alimentación, que ellos llamaron «prudente», tenían mucho menos riesgo de parto prematuro. En ella se encontraban alimentos como: verduras, frutas, pan rico en fibra, agua como única bebida o pollo). Del resto de modelos dietéticos, al final los investigadores indicaron que es importante quitar de nuestra alimentación las grasas, así como los alimentos procesados o precocinados, ya que aumentaban el riesgo de que nuestro bebé naciera antes de tiempo.
Vía | El economista
Foto | Bienestar y mucho más